Los brotes verdes que muchos apuntan vislumbrar en la economía española también se han dejado notar en los primeros desfiles de la semana de la moda de la capital, conocida como Mercedes-Benz Fashion Week de Madrid. Mucho colorido, riqueza de tejidos y prendas que demuestran que la época de oscuridad y tirar de fondo de armario ha pasado a la historia. Eso sí, con cabeza. De ahí que la colección del encargado de abrir los desfiles, el diseñador toledano Ulíses Mérida haya centrado su propuesta en los básicos, con la camisa como protagonista. Tras él, la catalana Nuria Sardá, al frente de la firma Andrés Sardá, ha demostrado que la lencería y la moda de baño están a la altura de cualquier vestido de alta costura. En "The Aspirant", la diseñadora, que contó con la actriz Hiba Abouk como cabeza de cartel, recogió el legado del sueño americano para presentar los primeros pasos de una actriz que acaba convertida en una diva del Hollywood de los años 40. Encajes con combinaciones de color, capas de tules transparentes, plumas, mangas abullonadas, negro y mucho rosa empolvado. El valenciano Francis Montesinos cerró la mañana con un homenaje a los países latinoamericanos en "Las reinas del Sur". Verde lima y negro para trajes de dos piezas. Blancos y crudos para los linos dignos de terratenientes. Y una explosión de rojo y aguamarinas en piezas vaporosas que ponen la nota glamurosa a la noche. No faltaron ni su clásico crochet ni el flamenco, de la mano de Azúcar Moreno.

Como era de esperar, no ha faltado esta mañana el homenaje a uno de los diseñadores más aplaudidos de la pasarela madrileña, el malagueño David Delfín, recientemente fallecido. Con la proyección de un cortometraje en el que su adorada Bimba Bosé, también fallecida, y él compartían protagonismo, la semana de la moda madrileña confirmó que nunca se olvidará de sus diseños y su gran aportación a la moda española.