Esta información ha sido elaborada por: Mónica G. SALAS, Eduardo GARCÍA, Franco TORRE, Javier CUARTAS y Pablo ÁLVAREZ.
"No entiendo cómo en el siglo XXI se puede pensar en hacer un país independiente que se quede fuera de la Unión Europea. Cataluña está muy desarrollada, tiene gente con gran capacidad de innovación, industrial y cultural, y es incomprensible que una parte importante de su población quiera irse de la UE con todo lo que supone. Me gustaría que hubiera elecciones y que se sepa realmente lo que quiere el pueblo catalán, pero siempre dentro del marco de la UE y de la Constitución española, que es lo que nos ha modernizado en estos 40 años".
"Es evidente que quienes están provocando esta situación tienen que responder, y es una responsabilidad no sólo política. A Puigdemont lo llaman golpista incluso los socialistas veteranos. La solución indispensable es aplicar el artículo 155, y la convocatoria de elecciones. Y a partir de ahí, responsabilidades para quienes han creado una situación que está mermando nuestro nivel económico y creando una situación desastrosa. El Rey está siendo contundente".
"Para una persona que vivió el 78, la situación es de gran tristeza. No alcanzo a comprenderla: es kafkiana, incomprensible, absurda, mala para todo el mundo, muy difícil de manejar. Deseo al Gobierno mucha suerte, como se la he deseado a todos cada vez que se han enfrentado con el tema de Cataluña. Pero es necesario que lo arreglemos. Tenemos que abrir una ventana a la esperanza para este país. Se ha hablado de regeneración de la política y de los políticos: yo creo que es un caso claro. Hace falta una regeneración de las gentes y de las mentes que se dedican a este oficio fundamental que se llama política. El Rey está muy en su sitio. Aplicar el artículo 155 es una salida constitucional. Es problemático porque nunca se ha aplicado, no hay un desarrollo reglamentario. Conviene que se haga con mucha pedagogía, sobre todo en Cataluña, para que quede claro que no se trata de suprimir una autonomía, sino de volver a colocarla en su cauce jurídico y constitucional".
"Hay que mantener la integridad del territorio español. Habrá que aplicar el 155, que es lo que corresponde a los políticos. El Rey es el garante de la integridad del Estado y está haciéndolo muy bien".
"La situación está en vías de solucionarse para rescatar la legalidad. La actuación del Gobierno y de los partidos constitucionalistas está siendo impecable. Hemos de tener un poco de paciencia. Personalmente, estoy tranquilo. El 155 es un instrumento constitucional, y cuando algunos dicen que hay que hacer política hay que responderles que no cabe mayor política que aplicar un artículo de la Constitución. Se está haciendo política de altísimo nivel. ¿Qué haría en este caso mi padre, Torcuato Fernández-Miranda? Estoy convencido que lo mismo que se está haciendo. Él acuñó la frase de pasar 'de la ley a la ley', y lo que no se puede es escapar de la ley".
"He dado un llavero de la Virgen de Covadonga a Puigdemont. Los hombres, cuando lo vemos muy difícil, recurrimos a todos los medios. Como decimos en Asturias, nunca llueve que no escampe. Al final, tiene que haber un momento de convivencia, ya no digo diálogo. Hace falta más esperanza y dejarse de agoreros. Hay que agotar todos los medios antes de llegar a los castigos".
"Lo veo con mucha tristeza. Duele. Entiendo todas las posiciones, pero entiendo también que la base de una convivencia es la ley y los muchos valores que nos unen. Nos ha costado tanto ser demócratas, transparentes, modernos, tener un sitio en el mundo, abrirnos a las fronteras, hablar idiomas, que los españoles estén en todos los sitios del mundo... No quiero retroceder, empequeñecerme... Al revés, abrirse al mundo es siempre muy positivo; y cerrarse, muy negativo. Todo esto lo digo con mucho respeto, y confiando en que se recobre la convivencia positiva y constructiva de las últimas décadas. Mi generación no acepta una vuelta atrás. Tiene que prevalecer la visión a medio y largo plazo, y una capacidad de pensar como Estado".
"Es un conflicto muy importante y creo que va a ser largo. El Gobierno está haciéndolo fenomenal, llevando los tiempos y cumpliendo todos los hitos para buscar una solución. Tengo la esperanza de que el problema vaya reconduciéndose. Que haya elecciones en Cataluña es casi inevitable, porque Puigdemont está fuera de la ley, y la ley es para todos".
"Creo que hay gente que estos días sufre pesadillas para ver el modo de volver atrás y evitar el lío. Esto es un juego que se ha ido de las manos. Alguien tenía que haber intervenido antes. Por lo que conozco de España, en Cataluña existe un problema identitario real, pero no veo motivos para que se separe España. Lo que veo son diferencias que enriquecen a España. Siempre me he preguntado por qué los catalanes, con las capacidades y la eficacia que tienen, no cumplen un rol más fuerte en España, en general. Quizá sea el momento de revisar la estructura institucional de España, no para desmembrarla, sino para hacerla más fuerte, dando más protagonismo a las regiones. El riesgo es que este problema de España se contagie a otros países, como Italia".
"Es lamentable tirar por la borda décadas de lucha por la unión de España y Europa. Es contrario a lo histórico, a lo sensato y es un absurdo".
"Es muy triste lo que está pasando en Cataluña. También me da para reflexionar: ¿Tendría que ser el Gobierno más enérgico? Yo creo que se están haciendo bien las cosas y despacio. Es lamentable el peso de la propaganda de la Generalitat en el extranjero. España es indivisible hasta que no se decida lo contrario en la Constitución. Y desde luego hay que manifestar el cariño hacia esos catalanes que no quieren esa independencia enloquecida e ilegal".
"Es un motivo de alegría que tanto el PP como el PSOE estén acercándose a la solución propuesta por Ciudadanos, la aplicación del artículo 155 de la Constitución, para resolver la crisis catalana".
"Respaldo al Presidente del Gobierno para devolver la legalidad a Cataluña, y también le insto a no aplicar medidas traumáticas que puedan incrementar el número de independentistas. Los personajes que han dado este autogolpe de Estado no me importan demasiado, lo que me importa es que haya dos millones de personas que en este momento no quieran estar en España. Eso hay que recuperarlo. El pueblo catalán es muy inteligente y no se va a pegar un tiro en el pie. Sabe que estar fuera de España es estar fuera de la Unión Europa y eso es el abismo absoluto".
"Hace muchísimos años que trabajo para la cooperación europea, en la cual está claro que no tenemos ningún grado de apego especial a ninguna parte. Conocemos gente en todos los países. En general, pues siempre resulta complicada la relación entre la Unión Europea y los estados, siempre estamos en esa balanza, en la cual tenemos que poner a un lado los estados y a otro la UE. Si empezamos a liarla con la creación de nuevos estados, seguramente romperemos Europa. Es imposible".
