El fallecimiento de Julio Puente llenó ayer de consternación a la sociedad asturiana. Desde ámbitos muy distintos se sucedieron los testimonios de duelo, siempre destacando la gran humanidad del periodista y su magisterio sobre toda una generación de profesionales.

Pedro de Silva, expresidente del Principado de Asturias: "Sagacidad, sentido de la noticia (de aquello que lo es y lo que no), conocimiento -por inmersión- de las pulsiones del medio social, criterio para conformar una opinión, capacidad para contar las cosas, buena pluma para mejorar la digestión del lector, son algunas de las condiciones del buen periodista, y Julio Puente las tenía todas en grado excelente, lo que le permitió dirigir con acierto grandes periódicos. Pero en el periodista total hay un ingrediente más, que consiste en una actitud, por así decir, inquisitiva, en servicio de 24 horas, ejercida además sin que se note. Viéndole por la calle caminando con cierto aire distante y algo solemne nadie diría que no se le escapaba nada de lo que en ese momento estaba sucediendo en el radio de acción de su curiosidad. Con razón muchos de los que trabajaban con él le llamaban 'el maestro'".

Graciano García, exdirector de la Fundación Princesa de Asturias: "Julio fue un periodista ejemplar, un compañero leal y, por todo ello, una gran pérdida para el periodismo asturiano. Coincidí con él en 'Asturias Diario', donde era un importante miembro del equipo. Faltan palabras para expresar la profunda tristeza que siento".

Amadeo Gancedo, excorresponsal de LA NUEVA ESPAÑA en la Comarca del Caudal: "Su amistad conmigo fue una de las pocas cosas buenas que me han ocurrido en mi vida. Era un auténtico maestro del periodismo que combinaba esa cualidad con una altura humana impresionante que transmitía a todos los que le rodeábamos. Como dirigente periodístico era extraordinario. Un detalle que destaco mucho es que él tenía mucha mano izquierda para conseguir que todos los días saliese el periódico con empuje y talento".

José Antonio Rodríguez Canal, exdirector adjunto de "El Comercio": "Le tuve un gran aprecio como periodista y persona. Lo que nunca cambió en él fue su gran capacidad profesional para hacer periodismo de buena calidad. Era un buen compañero y gran trabajador".

Marcelino Gutiérrez, director de "El Comercio": "Con su fallecimiento perdemos una figura emblemática del periodismo asturiano".

Mercedes Fernández, presidenta del PP de Asturias: "Julio Puente, un periodista inmenso y una persona extraordinaria. Te enseñaba cosas de forma sencilla sin pretender dar lecciones a nadie, pero su saber y forma de ser impecable dejarán huella y magnífico recuerdo a quienes tuvimos la suerte de conocerlo".

Ignacio Prendes, diputado de Ciudadanos en el Congreso: "D.E.P. Julio Puente. Deja una huella imborrable en el periodismo y en la sociedad asturiana. Su gran humanidad iba pareja con su gran talla como periodista de raza".

Luis José Ávila, periodista: "Me quedo planchao. Éramos muy amigos, un gran compañero en los tiempos, muy difíciles, de la última etapa de 'Región'. Tenía una gran personalidad y gran compañerismo, era muy generoso. Era un hombre tranquilo. Pero era un periodista intenso a la vez que tranquilo. Le llamábamos 'maestro'. Se pierde un pilar del periodismo de los buenos".

Juan de Lillo, periodista: "Era un gran periodista, maestro de una generación, además de un muy buen amigo y una excelente persona con la que coincidí desde la 'Hoja del Lunes'. Fue el conductor y padre periodístico de una generación de gente joven, eficaz y muy cordial".

Ceferino Vallina, presidente de la Asociación de la Prensa: "Era un maestro, con gran capacidad para transmitir la profesión a varias generaciones que aprendieron con él. Aún recuerdo la velada del homenaje que le hicimos en la asociación, tenía muy buen humor".

Rubén Suárez, crítico de arte: "Es una de las personas a las que he tenido yo más cariño durante mi singladura periodística, y posiblemente uno de los profesionales del periodismo más entregados que he tratado, vivía en exclusiva para la profesión. Pero además tenía esa bonhomía, esa humanidad tan grande? Era paternal hasta con los que éramos mayores que él. Siempre recordaré eso, el cariño y la cordialidad, aparte de que era un profesional fantástico, de la vieja escuela".

Evaristo Arce, periodista: "Era una muy buena persona y muy leal. Y un gran trabajador y profesional, algo que siempre acreditó. No hay nadie en la profesión que tenga un mal recuerdo de él".

Ángel Aznárez, magistrado: "Don Julio Puente, mi amigo, fue muchas cosas. Para mí se destaca su elegancia, propia de un aristócrata de los de antes, desgarbado y con zapatones, de cuna de verdad y no de mentira, o serón de pajas. En su sangre hubo mucho poso de la malagueña Antequera, la de miles de años. En los años noventa del pasado siglo fui a visitarle a su 'Faro de Vigo', aprovechando una disertación allí del sabio catalán Eugenio Trías, sobre lo más importante: la Religión. Ya don Julio, como don Eugenio Trías que le precedió en la muerte, habrá sabido lo que tanto nos hizo reír o llorar, dudando, en estos años: la ventaja de morirse está en saber si hay Dios, y como es, o la Nada, como antes de nacer".

Luis Meana, filósofo: "Fue Julio Puente gran vigía de Gijón. En continuidad, con su peculiar estilo, con muy ilustres antecesores: Adeflor, Carantoña o Clotas. Fue también, y de forma muy especial, vigía 'cum laude' del Sporting, alma de la ciudad. Ha habido muy pocos conocedores tan grandes como él del fútbol, por el que sentía una pasión incomparable. La información fue su religión, una cosa sagrada, cuando este oficio no era todavía un salvaje asunto de blogueros o tuiteros. Dirigió periódicos de máxima importancia, y fue uno de aquellos periodistas que -de forma destacada- hicieron la transición democrática en el periodismo de Asturias y 'occidentalizaron' nuestra prensa. Con su muerte, Gijón pierde el vigía que, desde el faro de este periódico, vigilaba, incluso en las noches más oscuras, nuestra navegación y trataba de poner un poco de luz a nuestros aconteceres".

Javier Gómez Cuesta, párroco de la iglesia de San Pedro, en Gijón: "Le dio un gran impulso a LA NUEVA ESPAÑA de Gijón. Era un hombre de trato agradable, fácil, y sobe todo un hombre que sabía valorar las cosas que se hacían y nos animaba siempre a escribir. Daba gusto trata con él. Y naturalmente lo suyo fueron las crónicas de fútbol: posiblemente haya sido la persona que mejor ha escrito sobre la historia del Sporting".

José Antonio González Montoto, director de la Casa Sacerdotal Diocesana: "Conocí a Puente en el Seminario: era un hombre entrañable, aficionadísimo al fútbol y muy buena persona. Muy cordial, muy sanote. Lo que hacía con el Sporting, esas crónicas, eran todo un tratado".

Javier Fernández, presidente del Sporting: "Como presidente, fue la primera persona que se interesó en escuchar las ideas y propuestas que tenía para el club. Como persona era muy razonable y con un gran conocimiento de Gijón y del Sporting. Un gijonés y un sportinguista de pro. Sentimos la pérdida de un referente playu".

Marcelino García Toral, entrenador de fútbol asturiano, actualmente en el Valencia, exjugador y entrenador del Sporting: "Le tenía un gran cariño porque siempre se portó muy bien conmigo".

Juan Carlos Ablanedo, exportero del Sporting y de la Selección: "En toda mi carrera profesional fue uno de los periodistas que me siguió con mayor precisión, rigor y calidad, siempre estuvo cerca de mi entorno y tenía una gran relación con él".

Iván Iglesias, exjugador de Sporting, Oviedo y Barcelona: "Era una persona íntegra en todos los sentidos, un profesional que engrandecía el periodismo".

El fútbol asturiano lamenta la pérdida de "un profundo conocedor del deporte regional"

Quini, exjugador del Sporting, el Barcelona y la Selección Española: "Julio era una persona cercana, que transmitía normalidad en este mundo del fútbol. Un hombre atento, con el que era fácil llevarse bien. Un periodista diferente, con el que era fácil hablar. Todo el mundo leía sus artículos".

Joaquín, exjugador del Spoting y presidente de la asociación de veteranos del club: "Lamento la pérdida de un gran profesional que disfrutaba con lo que hacía. Un periodista capaz de escribir con mucho humor y llenar sus textos de ironía. Todos lo echábamos de menos, y cuando no salía su artículo porque siempre estábamos pendientes de lo que iba a decir Julio. Una cualidad suya es que era capaz de sintetizar en dos frases un gran comentario. Siempre fue muy cercano con todos los jugadores del Sporting, mientas jugaron al fútbol y después, con un trato exquisito. Tenía la suerte de verlo a menudo y siempre se paraba a interesarse por algún compañero. Era alguien muy especial".

Iñaki Churruca, exjugador del Sporting, del Athletic y de la Selección: "Era un sportinguista que nos trataba muy bien a todos los futbolistas, nos dispensó siempre un trato exquisito, era una persona afable, que vivía su profesión, el fútbol y el Sporting con gran pasión".

Luis Mitre, exdirectivo del Sporting y empresario: "Me he emocionado. Lo conocí en la época de Pasiego, era un gran periodista y un gran señor. Un gran amigo. Lo quería mucho y tenía pendiente una comida con él cuando mejorase un poco".

David Mata, gerente del Real Oviedo: "Es una pérdida irreparable para el periodismo. Se va uno de los artífices del auge de los periódicos en las últimas décadas. Era un periodista con buena pluma, profundo conocedor no sólo del deporte asturiano sino de otros géneros de la comunicación. Trabajó con mi padre, siempre me decía que Julio Puente era uno de los periodistas de cuna que estaba siempre al pie de la noticia. Un referente. Un periodista de raza, de los de antes, que dejó escuela. Su hijo, Pablo González, sigue los pasos de su padre en la actualidad en el periódico. El Real Oviedo lamenta la triste pérdida de Julio Puente y envía su más sentido pésame a su viuda, Noemí, y a sus hijos Pablo, Noemí y José Julio.

Eugenio Prieto, expresidente del Real Oviedo: "Me vino a ver cuando me operé y me regaló un libro sobre Rijkaard. Lo recuerdo con cariño, como un gran profesional y una mejor persona. Lo leí siempre, hasta el último artículo. Nos perderemos estas frases tan suyas, como: 'Señoras y señores diputados, esto no es Bélgica'".

Toni Fidalgo, exdirector adjunto de la Liga de Fútbol Profesional: "Somos de la época del periodismo de a pie, en blanco y negro. Hace muchos años que teníamos relación. En estos momentos suena a lugar común decir que fue un maestro, pero él lo era por definición. Nosotros lo llamábamos 'maestrón', por esa actitud suya, sus gestos y su agudísimo sentido del humor. Un tipo grande en todos los sentidos".

Javier Irureta, entrenador de fútbol: "Le conocí en Oviedo. Era un gran paisano. Luego coincidí en Vigo con él. Era un gran profesional, muy equilibrado. Hablábamos mucho de fútbol, y él lo hacía con mucho sentido".