El cantante asturiano Melendi está en plena madurez de su carrera. Lleva varios lustros en la punta de lanza de la escena y está completamente compenetrado con público y colegas. No en vano, en "Ahora", su nuevo álbum, colaboran Carlos Vives, Alejandro Sanz y Arkano. El paso del tiempo ha propiciado una evolución (al menos varios cambios) tanto en la forma de hacer canciones como entre sus seguidores: "Estoy en los peligrosos 40 años y tanto yo como mi público fuimos creciendo juntos", cuenta en una charla con LA NUEVA ESPAÑA.
"Mírame", que es la primera canción del nuevo disco, ya desvela las variantes musicales, algo por cierto que ya no es nuevo en la andadura del cantante ovetense: "Siempre que saco un disco hay cambios para estar en la actualidad, aunque las canciones las hago con guitarra y piano. Pero con este mundo digital sí que hay más cambios".
Tiene su lógica, ya que no es lo mismo hacer canciones con 18 años que ahora, que cumple los 40 años. "Vas cambiando, estudiando la manera de hacer, y eso se refleja en las canciones", afirma.
Y esta evolución, o estos cambios, se traducen en los numerosos fieles que ha reclutado a lo largo de los años. "El público ha pasado por lo mismo que yo. Éramos jóvenes, fuimos creciendo, madurando juntos; pero el público sigue sintiendo lo mismo, porque hablo de cosas que nos pasan a todos y que nos van ocurriendo en diferentes etapas".
Hay ejemplos de todo lo dicho en canciones como "Tiempos de re-evolución", con la que Melendi pretende buscar explicaciones a los tiempos que corren: "Esa canción nace de que no creo en las revoluciones y sí en la evolución. No es tan complicado hacer una revolución, lo que pasa es que hay que ver cómo acaban".
Le resultó grata, muy grata, la colaboración en su disco de Carlos Vives, del que le recordamos que dio un concierto en Oviedo lloviendo y sin lona que tapara el escenario. Es decir, que actuó bajo una auténtica "gota fría", que fue su éxito de verano. El trabajo con Vives le resultó "maravilloso", dice Melendi. "Es un tipazo. Le mandé la canción ('El arrepentido') y le encantó. Luego él incluyó detalles del vallenato; es un tipo tal como lo ves; tanto él como su mujer. Estuvimos en Santa Marta y grabamos en su casa. Fue una gran experiencia", recuerda.
Otra buena sensación se la produjo Arkano, "un tipo increíble que lo tiene todo claro para la edad que tiene". Arkano y Alejandro Sanz intervienen en "Déjala que baile", que, efectivamente, confirma la nueva atmósfera musical del Melendi de 2018. Respecto al autor de "Corazón partío", no tiene palabras: "A Alejandro le pedí por favor que trabajara conmigo, le dije lo que lo admiro y que colaborara conmigo. Él escuchó la canción y aceptó. Estoy muy orgulloso". Tan es así que Melendi remata la cuestión de forma contundente: "Son el top del top, los más grandes".
Confiesa el cantante ovetense que desde "Lágrimas desordenadas" ya encontró un espacio diferente, "más pop, más cuerda, más piano y sonidos acústicos filtrados. Un sonido con el que me siento más cómodo", apunta.
Melendi es futbolero, jugó al fútbol y es oviedista. Así que el cambio de tercio de la charla es con el Real Oviedo. Está como pez en el agua hablando de fútbol y de su club. "Es un equipo hecho que trabaja y presiona. Y con un entrenador muy bueno. Encontró un sistema que funciona bien. No sé, parece profético. El año pasado empezamos el declive con un fallo arbitral en Tenerife y ahora en Cádiz pasó lo mismo. Pero confío en este equipo. Es diferente. En el campo no se le puede reprochar nada, y con Anquela se dejan el alma". Melendi tiene el ojo puesto en, como mínimo, la promoción, y si hay ascenso, hay noticia. "Si subimos me baño en pelota donde sea... te lo digo en serio; me voy a la Cibeles y me baño yo solo en pelota".
