El filólogo asturiano Xosé Lluis García Arias presentará el próximo jueves, en el Paraninfo de la Universidad de Oviedo, el primer tomo del "Diccionariu Etimolóxicu de la Llingua Asturiana" (DELLA), obra fundamental en el estudio y la historia de una lengua. Catedrático de Dialectología ya jubilado de la citada institución académica, primer presidente de la Academia de la Llingua Asturiana, uno de los fundadores de Conceyu Bable y autor también del "Diccionariu de la Llingua Asturiana", García Arias está orgulloso de que sus estudios hayan contribuido "a poner en el mapa lingüístico actual la existencia y la posibilidad de la lengua asturiana".

En el acto, participará, además del Rector y el presidente de la Academia de la Llingua, Michael Metzeltin, profesor de la Universidad de Viena y uno de los tres autores de "Lexikon der Romanistischen Linguistik", obra de referencia de las lenguas románicas.

- ¿Qué significa para la lengua asturiana contar con el "Diccionariu Etimolóxicu"?

-Es un paso de gran significado cultural y lingüístico por la cantidad de materiales que se barajan, por la organización de esos materiales, por el estudio al que se prestan, por la comparación que procuran con otros dominios lingüísticos y por las conclusiones que permiten sacar.

- ¿A qué nivel lingüístico se pone el asturiano con este diccionario?

-A un nivel que consiguió el castellano con Corominas Pascual hace unos años, que logró el catalán con Corominas años después, en el siglo XX, y que alcanzó la lengua portuguesa con el de Machado.

- ¿En las lenguas oficiales españolas de origen románico, además del castellano, sólo lo tiene el catalán?

-Sólo el catalán. El gallego no lo tiene.

- ¿Qué caracteriza este Diccionariu?

-Primeramente, la recopilación de la mayor parte de las voces documentadas o elementos del léxico hasta el siglo XX. Cada uno de estos elementos se define y se pone el lugar donde está recogida la definición, siempre que sea posible, y se dan las variantes que tenga la palabra resaltada en la entrada. De tal manera que una palabra como "atayar", que es general en Asturias, hay unos pocos sitios en los que se dice "atachar", pues debajo de "atayar" se pone también "atachar" y se dice dónde se mantiene ese término. Así se compagina la variante lingüística con la información sobre los lugares donde se sabe que esa palabra tiene o tuvo vigencia.

- Este tipo de conclusiones parece poner en cuestión la teoría de los bables; hay variaciones, pero también unidad idiomática.

-La teoría de los bables se vuelve absurda al ver la profunda unidad del asturiano, sin negar, evidentemente, las variaciones que puedan existir. También se debe destacar que para que cada una de las palabras ofrezca la mayor información posible se adjuntan los datos históricos más relevantes que conocemos sobre ellas. De una palabra como "tarrecer", que significa temer, encontramos numerosos ejemplos a lo largo de la historia de su uso, ya desde 1326. En otros casos, las palabras correspondientes tienen usos anteriores, por ejemplo, de los siglos IX o X. Todo ello resulta de una gran contundencia documental para ver el proceso evolutivo del asturiano. Nadie podrá decir que se inventa nada cuando en muchos casos la documentación es manifiesta.

- Para un filólogo tiene que ser apasionante el estudio etimológico de las palabras.

-Pero también resulta bastante complejo porque debes compararlo con otras lenguas donde se dé la misma palabra o parecida, ver el alcance y las diferencias y sacar las conclusiones. Después es cuando uno hace una propuesta etimológica que, en la mayor parte de los casos, va a ser de tipo latino, puesto que el asturiano es una lengua latina; pero, en otros casos, la solución hay que buscarla en algún idioma prerromano, a veces de tipo céltico, o en lenguas posteriores de tipo germánico o de influencia arábiga. A esto añadamos las influencias que el asturiano recibe del provenzal, del francés y naturalmente del castellano, entre otros.

- ¿Qué papel jugó la burguesía en el rechazo al asturiano a finales del XIX, coincidiendo con la industrialización, sobre todo si lo comparamos con otros territorios españoles con lenguas minoritarias?

-Los asturianos se comunicaron entre sí fundamentalmente en asturiano hasta finales del siglo XIV, en que las clases dirigentes, por sus intereses, castellanizan el país, aunque nunca lo lograron plenamente. En el caso asturiano, la burguesía no supo estar a la altura de las circunstancias, en buena medida porque no era asturiana y no estaba arraigada. Esa característica se nota no sólo en la lengua, también en la falta de aspiraciones de desarrollo cultural asturiano, no supo canalizar los sentimientos del país. Aunque parezca broma, si hubiéramos tenido una burguesía asturiana no solamente se habría llenado el Campoamor de amigos de la ópera, sino de fieles seguidores de una canción asturiana potente que sólo unos pocos supieron descubrir en el siglo XX.

- ¿Qué momento histórico vive Asturias?

-Muy contradictorio. Tenemos una juventud con la información debida y sin los inconvenientes represivos de otro tiempo, pero, desgraciadamente, este momento coincide con la destrucción del país, que tienen que abandonar porque otra vez la clase dirigente se muestra incapaz de darle salida profesional digna en la propia tierra.

- ¿Por qué cree que en algunos sectores asturianos existe tanto miedo a la oficialidad del asturiano?

-O porque está mal explicada o porque hay personas que son como los ídolos de Egipto, que teniendo orejas no saben oír.

- ¿La oficialidad salvará al asturiano?

-La oficialidad por sí sola no salvará al asturiano, pero sin ella es imposible su salvación en las circunstancias actuales.

- ¿Defender el asturiano es ir contra el castellano?

-Solamente un mal padre desearía cerrar las puertas a su hijo privándole de una herramienta de comunicación como el castellano. Yo también sé castellano y quiero seguir sabiéndolo, siempre que no toquen el idioma de mi pueblo, que merece el respeto y la potencia razonable en nuestra sociedad.

- Dígame tres palabras asturianas que le gusten especialmente y por qué.

-"Señardá", nostalgia en español, porque es muy eufónica y evoca contenidos placenteros; "prestar", disfrutar, porque sirve para manifestar la satisfacción íntima y al mismo tiempo para brindar a la gente en una manifestación "¡que te preste!", y "naguar", ansiar, porque siempre toi naguando por algo.