Emilio Casares: "La situación de la zarzuela en España es dramática"

Lo hizo en la mesa redonda que cerró las jornadas sobre el futuro de la zarzuela, auspiciadas por la Fundación Municipal de Cultura del Ayuntamiento de Oviedo, la única ciudad de España que tiene un festival de zarzuela, desde hace 25 años. En la charla también participaron los catedráticos de Musicología de la Universidad de Oviedo María Encina Cortizo y Ramón Sobrino. Fue moderada por el también musicólogo Cosme Marina, director artístico del Festival de Zarzuela de Oviedo.

"Es terrible que los políticos responsables de la cultura no se den cuenta de que tienen un patrimonio que hay que defender. Es una falta de sabiduría natural. Tenemos un desconocimiento tremendo de nuestro repertorio", aseguró Casares.

Gracias a su labor, continuada por discípulos como Cortizo y Sobrino, hace cuarenta años la Universidad de Oviedo, donde Casares fue profesor, abanderó la recuperación de zarzuelas olvidadas, de las que en muchos casos no se conservaban ni las partituras originales. Casares destacó que España es "el país más musical del mundo", con 9.000 zarzuelas, 800 óperas y 3.000 tonadillas, frente a las 10.000 óperas italianas registradas. "Somos un país canoro, cantamos en todos los lugares, pero hay muchísimo que hacer. Hay miedo por falta de conocimiento y de confianza. No nos merecemos a ciertos ministros de Cultura". En 1913 se estrenaron en Madrid 182 zarzuelas, resaltó el profesor Casares, que definió el género como "el que expresa como ningún otro lo que podríamos denominar el yo musical de España, la principal aportación española el teatro musical universal".

María Encina Cortizo, que comenzó su intervención con un recuerdo al fallecido Luis G. Iberni, destacó que "en los últimos años hemos normalizado muchas cosas. Nuestra zarzuela nunca había tenido ediciones para orquesta y hoy no se puede trabajar así; en 1992 nos planteamos realizar la edición de partituras". Cortizo explicó que la investigación y el desarrollo también deben aplicarse a las Humanidades. Por ejemplo, con un proyecto para editar y rescatar partituras. También destacó la importancia del festival ovetense. "Es una referencia en España", afirmó.

"Si preguntamos a un niño el nombre de un pintor español del siglo XVII lo sabe, pero no el de un músico", lamentó Ramón Sobrino, que contó su experiencia en casa del maestro Joaquín Rodrigo, para recuperar una zarzuela que estaba transcrita con erratas por terceras personas, debido a la ceguera del maestro. "Me acuerdo de estar allí tocando el piano y Victoria, la esposa del maestro, me decía que era como yo lo hacía". Sobrino reveló que de obras tan famosas como "La canción del olvido, "La revoltosa", o "El bateo" no existía ningún tipo de partitura. "Sólo había materiales antiguos".

"El caso de 'Marina', que realmente es una ópera, daría para una conferencia, hasta aparecieron trozos de música nuevos", comentó. "Ésta es una labor hecha desde la musicología universitaria impulsada por Emilio Casares, que hay que seguir realizando", recalcó el catedrático.

Emilio Casares, que ha redactado la presentación de la candidatura de la zarzuela para ser declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco, criticó "la locura y el disparate que supone unir el Teatro Real con el Teatro de la Zarzuela, al que van a llamar Teatro Nacional de la Ópera y la Zarzuela". El Ministerio de Cultura y la Fundación del Teatro Real llevan seis meses estableciendo el marco que permitiría la fusión, un proyecto que debe ser aprobado por real decreto por el Gobierno y que estará listo en un par de meses. Casares, que situó el origen del género español en el siglo XVII, en el palacio de la Zarzuela, construido para un hijo de Felipe IV, resaltó que se trata de "un género centenario plenamente vivo que ha llegado hasta hoy con una continua metamorfosis, ligado totalmente a la sociedad española; inmensamente versátil y que recoge todo tipo de contenidos".