El genetista paleontólogo Svante Pääbo (Estocolmo, 20 de abril de 1955) ha sido galardonado hoy con el premio "Princesa de Asturias" de Investigación Científica y Técnica 2018. El sueco, director del área de genética del Max Planck Institute de Antropología Evolutiva de Leipzig, lideró el proyecto del genoma del neandertal (Neanderthal genome project) promovido conjuntamente en julio del 2006 por el Instituto Max Planck y la empresa de los Estados Unidos 454 Life Sciences.

El proyecto trataba de descifrar el genoma completo del Neandertal, lo que una vez conseguido permitió comprobar que el hombre moderno euroasiático comparte entre un uno y un cuatro por ciento de su ADN con los neandertales, con los que debió de cruzarse en el Próximo Oriente tras su salida de África.

Para los investigadores, los humanos modernos comparten la genética de aquella especie de aspecto robusto que se creía desaparecida sin que se conocieran a ciencia cierta las causas de su extinción. Los resultados apuntaron que no hubo tal desaparición porque el cruce genético con los sapiens nos convierte en sus descendientes.

El grupo de Svante Pääbo presentó en 2010 los resultados del borrador genómico del Neandertal, anunciando que se habían llegado a secuenciar más de 5.000 millones de bases de ADN, tomando como material de partida muestras óseas de seis neandertales, entre ellos dos mujeres del yacimiento asturiano del Sidrón, en Piloña.

La mayor parte del material procedía de la cueva de Vindija, en Croacia, de donde se utilizaron los restos de tres neandertales. Se emplearon muestras de un yacimiento en Mezmaiskaya, en el sur de Rusia, y el esqueleto de 40.000 años de antigüedad hallado en el valle de Neander (Alemania), que dio nombre a la especie. También se pudo apreciar que el momento de contacto entre las dos especies se produjo entre hace 80.000 y 50.000 años.

La candidatura de Pääbo fue propuesta por el rector de la Universidad de Burgos, Manuel Pérez Mateos, y se impuso en las últimas votaciones entre las 38 propuestas de 17 nacionalidades que optaban a este galardón.

El jurado, presidido por el científico Pedro Miguel Echenique, ha concedido el galardón a Pääbo "por haber desarrollado métodos precisos para el estudio del ADN antiguo que han permitido la recuperación y el análisis del genoma de especies desaparecidas hace cientos de miles de años".

El acta incide en que Pääbo ha abierto un nuevo campo de investigación, la paleogenómica, "que ha hecho posible conocer la evolución reciente de numerosas especies, incluida la humana".

"Particularmente relevante es la secuenciación del genoma de los neandertales y el hallazgo de que genes de estos y otros humanos extintos forman parte del acervo genético de la Humanidad", resalta el jurado, que añade que "sus descubrimientos obligan a reescribir la historia de nuestra especie".

Éste ha sido el séptimo premio en fallarse en esta XXVIII edición de los premios "Princesa de Asturias" tras los concedidos a Martin Scorsese (Artes), Alma Guillermoprieto (Comunicación y Humanidades), Amref Health África (Cooperación Internacional), Reinhold Messner y Krzysztof Wielicki (Deportes), Fred Vargas (Letras) y Michael J. Sandel (Ciencias Sociales).

El pasado año fueron galardonados la Colaboración Científica LIGO y tres de los físicos que la impulsaron, Rainer Weiss, Kip S. Thorne y Barry C. Barish, por sus aportaciones en la detección directa de ondas gravitacionales, en las que se basa la nueva astronomía.

Los ocho Premios Princesa de Asturias están dotados con la reproducción de una escultura diseñada por Joan Miró, 50.000 euros, un diploma y una insignia acreditativa