Descubren en las excavaciones arqueológicas de Linares (Castañera, Belmonte de Miranda) u n horno de la Edad del Bronce -II milenio a. C.-. De momento, el grupo de investigación trabaja con la hipótesis de que se trata de un horno doméstico que, por sus dimensiones, podría ser de uso comunal. La construcción está asociada a pequeños fuegos, a espacios aterrazados y a abundante cerámica, con una cronología que va del bronce antiguo al bronce final.

El yacimiento, excavado desde 2013, está aportando una información de gran relevancia que permite documentar un periodo prácticamente desconocido de la historia de Asturias, del que sólo existen datos procedentes de los enterramientos megalíticos y de algunas ocupaciones en cueva. La investigación de estas estructuras aportará importante información sobre el periodo inmediatamente anterior a la aparición de la cultura castreña, convirtiéndose la zona en la que se localiza Linares en un laboratorio único para comprender la dinámica de las zonas de poblamiento en la prehistoria reciente.

Todos estos trabajos se enmarcan en las labores arqueológicas que el equipo de investigación LLABOR, dirigido por Margarita Fernández Mier, profesora titular de la Universidad de Oviedo, desarrolla en el municipio de Balmonte de Miranda desde el año 2009. Tomando el territorio de la aldea de Vigaña como un yacimiento arqueológico, se ha intervenido en distintos elementos, tanto lugares de hábitat como espacios de cultivo y de uso ganadero que han aportado una espectacular información de carácter diacrónico que permiten delinear la historia de la aldea en la larga duración, desde el cuarto milenio hasta la actualidad.

Margarita Fernández Mier afirma que los "importantes resultados de la metodología de trabajo implementada en el yacimiento a lo largo de las ocho campañas arqueológicas también permiten constatar la necesidad de una reflexión sobre la arqueología que se ha de hacer en el medio rural, en el que solo se protegen yacimientos monumentales, sin que exista una rigurosa aproximación a su catalogación y estudio, lo que conlleva la pérdida de un volumen de información y de bienes patrimoniales que permiten historiar el territorio”.