El poeta gijonés Jaime Federico Rollán Ortiz, miembro del Real Instituto de Estudios Asturias (Ridea) desde 1999, falleció ayer en León, ciudad en la que residía desde hace cuatro décadas, a los 85 años. El óbito se produjo a la una de la tarde en el hospital de la capital leonesa después de el escritor ingresara por urgencias, poco antes, como consecuencia de la fibrosis pulmorar que sufría hace años. "Fue todo muy rápido", explicó su primo Luis Rollán.

Jaime Federico Rollán Ortiz, que nació en la gijonesa calle Instituto en 1933, deja una obra poética en la que domina, sobre todo en sus últimos versos, el sentimiento amoroso. Hace cuatro años presentó en el Ateneo Jovellanos, institución de su ciudad natal a la que estaba muy ligado, el poemario "Última carta a Katherine". Se hace evidente, desde el mismo título, el influjo de Pedro Salinas, uno de los grandes autores de la Generación del 27. En un "Directo al corazón" que Cuca Alonso le hizo para LA NUEVA ESPAÑA, el autor gijonés confesaba cierta querencia por autores como Vicente Aleixandre, Gerardo Diego y Dámaso Alonso. Publicó siete poemarios. En "La sombra de la ola" dejó constancia de su identificación con Gijón, "ciudad el mar", y con León, "ciudad del amor". Estaba muy unido a su mujer, Carmen.

Tras sus estudios de Derecho se hizo funcionario. Su primer destino fue Palencia. Firmó varios trabajos sobre arte e historia. El funeral por el poeta gijonés se celebrará hoy, a las cuatro y media de la tarde, en la iglesia de los Padres Agustinos, en León.