Llega septiembre, la vuelta al cole y, por desgracia, en muchos casos, al acoso escolar, un tipo de violencia que no desaparece ni durante las vacaciones y para cuya erradicación los expertos consultados por Efe ofrecen una serie de consejos.

"Cómo afrontar el nuevo curso, cómo olvidar lo que han vivido los cursos pasados y cómo superar el miedo a volver a hacer a una situación de acoso e indefensión" son las principales inquietudes que los niños y jóvenes víctimas de maltrato han transmitido este verano al teléfono de la Fundación de Ayuda a Niños y Adolescentes en Riesgo (ANAR).

Lo ha explicado a Efe la psicóloga de esa Fundación, Diana Díaz, quien destaca que las campañas de prevención lanzadas en los últimos años han logrado que haya "mucha más concienciación".

También han conseguido que el acoso escolar sea percibido como "un tipo de maltrato" y que los niños sean conscientes de que "la movilización de los compañeros" es la estrategia más eficaz para frenar el acoso, enfatiza.

Según datos de la Fundación ANAR, la mayoría de los niños que hacen las consultas sobre acoso escolar tienen entre 11 y 13 años, mientras que en las preguntas sobre "cyberbullying" la edad media es de 14 años.

"Las razones que desencadenan el acoso escolar según las llamadas que recibimos por parte de las víctimas son la marginación ya sea por destacar por su inteligencia, por tener algún tipo de defecto físico o por ser poco abierto en relaciones sociales y no seguir los mismos gustos que la mayoría", explica la psicóloga.

Para hacer frente al acoso desde el primer día de clase, Díaz recomienda que "no haya demora" en la petición de ayuda, que las posibles víctimas lo hagan desde el momento en el que empiecen a sentir los primeros síntomas.

Además, insta a trabajar la autoestima y las habilidades sociales para que las víctimas tengan más "seguridad" a la hora de resolver cualquier tipo de situación.

"Hay que trasladar el mensaje de que esta situación no tiene por qué ser permanente, sino que es temporal y se puede resolver", apunta Díaz.

Y subraya la importancia de la figura del profesor. Juega un papel "muy importante", ya que puede "promover dinámicas muy enriquecedoras" de prevención que incluyan a la víctima, al agresor y a los espectadores que "son claves para frenar la situación de acoso", añade.

Por su parte, el director de la Asociación EducaLIKE, Guillermo Cánovas, recomienda "tolerancia cero" contra el acoso escolar y a los padres les pide que "crean lo que dice su hijo y que no justifiquen la situación porque su hijo no se defienda o porque no diga lo que piensa".

"Los padres tienen que estar pendientes de las señales psicosomáticas como la pérdida de apetito, el dolor de estómago o la dificultad para conciliar el sueño; de las emocionales, como romper la comunicación de su día a día por temor a ser preguntados; y de las físicas como los moratones o marcas en los brazos", señala Cánovas.

Asimismo, incide en la conveniencia de seguir "los protocolos de actuación y no saltárselos": primero acudir al tutor y después a la la dirección del colegio", porque, explica, el "error" sería dirigirse a la familia del otro adolescente.

"El acosador te acosa porque ve que tú no te defiendes, eres una víctima fácil y se va a cebar contigo", subraya el director de EducaLIKE.

Ante esta situación, propone la asertividad como forma de comunicación para que actúe como "vacuna" contra el acoso escolar de modo que el menor "defiende sus derechos y dice lo que piensa, pero no de forma agresiva".

Las víctimas de este tipo de violencia pueden encontrar ayuda en el teléfono contra el acoso escolar del Ministerio de Educación 900 018 018 y en el de la Fundación ANAR 900 20 20 10.

Por último, desde ANAR reconocen que a través del chat "están atendiendo casos de especial gravedad" y destacan "el plus" que ha supuesto esta vía de comunicación para todos aquellos adolescentes que no se atreven a llamar ya que "a través del él se encuentran mucho más cómodos".

Un chat "gratuito, confidencial y anónimo" disponible en www.anar.org/chat-anar, abierto desde las 16:00 hasta las 24:00 horas en el que un psicólogo de la Fundación Anar chatea con quien elija esta vía de comunicación todo el tiempo que sea necesario para "resolver aquello que tanto le preocupa y encontrar juntos una solución".