El filósofo Michael Sandel, premio "Princesa de Asturias" de Ciencias Sociales, invita a la reflexión con cada una de sus palabras. El profesor de la Universidad de Harvard llena las aulas cada curso por su capacidad de hacer pensar a los alumnos y hacerlos partícipes de la filosofía. "Hago que los alumnos se involucren y resuelvan dilemas reales y actuales", dijo. Esta tarde, durante su primera rueda de prensa, también invitó a la reflexión sobre diversos temas para superar los "momentos difíciles para la democracia" que vivimos.

"Nos enfrentamos a muchos desafíos como el auge de la xenofobia o la hostilidad con inmigrantes", destacó el filósofo al tiempo que apeló a "hacer una política con más sentido".

El discurso de Sandel también se detuvo a analizar el papel de las redes sociales en la actualidad. "Pensamos que eran buenas para fomentar la fuerza democrática de los ciudadanos pero ahora hemos visto que tiene un lado oscuro", explica. Se han convertido en "instrumentos de manipulación política" y en ellas se ha fraguado la lacra de las noticias falsas. A estos dos problemas se suma otro, tal como apunta el filósofo: "El poder se está concentrando en pocas empresas de redes sociales y se presentan como un peligro; nos enfrentamos al abuso de poder de la revolución digital".

El filósofo también reflexionó sobre las diferentes concepciones del bien común, un tema que aborda en su último libro "Encountering China". Sandel admite que no hay un sólo bien común y diferencia entre el concepto occidental, que sigue una filosofía más individualista; y el concepto oriental, que tiene como prioridad la comunidad. Esta versión, tan "simplista", llama a la "búsqueda urgente" de distintas versiones nuevas.

Michael Sandel no quiso profundizar sobre la polémica del independentismo catalán pero pero sí apuntó, desde un punto de vista más general, a que la sociedad debe discutir más sobre su identidad. "No existe un debate público y sano sobre eso y los nacionalismos tienden a rellenar este vacío", explica.

Vientres de alquiler

La gestación subrogada o los vientre de alquiler son uno de esos dilemas que se encuentra hoy sobre la mesa. El propio Sandel debatió sobre este asunto con sus alumnos en su última clase antes de viajar a Asturias. "Siempre he sido crítico con los mercados de compraventa", sentenció. Sobre este tema le preocupa especialmente convertir a la mujer "en una fábrica".