La producción de Francisco de Goya como dibujante es una de las más relevantes y singulares de toda la historia del Arte. Para ponerla en valor, el Museo del Prado y la Fundación Botín impulsan un proyecto de investigación con el objetivo de reunir y analizar todo ese catálogo, que se sustanciará en cinco volúmenes y una exposición fijada para noviembre de 2019. Ayer, en el Centro Botín de Santander, se presentó el segundo volumen de ese "Catálogo razonado de los dibujos de Francisco de Goya", que reúne la obra gráfica de la primera etapa de la producción del artista, incluyendo los contenidos en su correspondencia con su amigo Martín Zapater. Unas cartas que, además de arrojar luz sobre la personalidad de Goya, insinúan una posible relación amorosa entre los dos hombres.

El carácter homosexual de la amistad entre el artista aragonés y Zapater, un empresario zaragozano de ideas ilustradas a quien Goya habría conocido en su niñez y al que dedicó dos retratos, ya había sido defendida por algunos estudiosos de la vida y la obra del pintor. Pero la difusión reciente de algunas cartas entre ambos ha reforzado esa hipótesis.

La naturaleza de la relación entre Goya y Zapater centró ayer buena parte del interés de la presentación del volumen, tras revelar Manuela B. Mena, jefa de conservación de pintura del siglo XVIII y Goya del Museo del Prado, que al volumen se incorpora una carta recién adquirida por la gran pinacoteca nacional, fechada el 10 de noviembre de 1790, en cuyo encabezado Goya dibujó un corazón "inflamado de amor" por su "amigo amoroso", que diría Mena, según "El Mundo".

En otra carta, fechada ese mismo mes, Goya es muy explícito en sus sentimientos hacia Zapater: "El mayor vien de cuantos llenan [mi] corazon, acabo de recivir la ynapreciable tuya; sí sí que me abibas mis sentidos con tus discretas y amistosas produciones, con tu retrato delante me parece que tengo la dulzura de estar contigo ay mio de mi alma no creyera que la amistad podia llegar al periodo que esttoy esperimentando".

Más allá de la cuestión relativa a la posible homosexualidad del artista, el "Catálogo razonado de los dibujos de Francisco de Goya" es, a decir de expertos como Miguel Falomir, director del Museo del Prado, "un hito historiográfico y editorial" y una obra "ambiciosa" tanto por el volumen de los dibujos estudiados como por la envergadura del artista, "uno de los grandes colosos del arte occidental".