"Fui una niña que hacía los regalos para los amigos porque no tenía dinero para comprarlos"

-Estoy muy contenta por el premio, pero es un momento duro de trabajo, sin movimiento.

- ¿No se sale de la crisis?

-No es mi sensación ni la que capto en la calle. El año pasado fue parecido y sigue la cuesta abajo. Dicen que por Madrid se mueve algo de construcción grande. Aquí no nos llega nada.

Inés y su marido, Germán, estaban en paro. Ella es licenciada en Historia del Arte y él, arquitecto. Una plaza de asesor técnico urbanístico del occidente de Asturias los mudó de Madrid centro a Vegadeo cuando no había el puente de Los Santos.

-Lo más chocante era levantarte temprano con mucho que hacer y haber terminado una hora después. Todo el mundo te conocía sin que supieras cómo ni por qué. Preguntamos unas dudas al policía municipal, nos respondió muy amable y dijo "sin ánimo policial, ¿ustedes quiénes son?".

- ¿Buen comienzo?

-El paisanaje de la zona es poco acogedor, aunque no todos los pueblos son iguales.

Después de tiempo en paro obtuvo una beca de tres años para la informatización del catálogo de la biblioteca. Cuando eso acabó...

-Me planteé hacer algo con las manos, unido a la faceta teórica de la Historia del Arte. Desde niña hacía los adornos de Navidad y los regalos para los amigos.

- ¿Había antecedentes familiares?

-Mi abuelo trenzaba unas palmas impresionantes. Mi padre era un músico de nivel. Renunció al cargo de organista de Patrimonio Nacional porque no alcanzaba para darnos de comer a dos hijos. Había ido para cura y era licenciado en Filosofía y Letras. Mi madre era capaz de mover una casa y los muebles con un martillo y un destornillador.

En Madrid, Inés había hecho Modelado en Artes y Oficios. Se formó en la Escuela de Emprendedores de Valnalón, hizo un curso de joyería en Madrid, asistió a talleres de pintura, acuarela y esmaltado. En 2006 dio de alta la empresa, sin ayudas.

-Te lanzas. Pensé que no iba a perder mucho, que lo peor que podía pasar era que tuviera que regalar pendientitos a la familia toda la vida. Pero estar legalmente constituida, como hay que estar, cuesta 500 euros al mes en Seguridad Social, asesoría, teléfono, sin contar el material.

- ¿Cómo fueron los comienzos?

-En el momento burbujeante en que se vendía cualquier cosa. Como el público que tienes en Asturias se acaba enseguida hice ferias y mercados de artesanía por toda España. Hay que vender mucho. La gente no sabe todo lo que hay detrás.

- Yo tampoco. Cuente.

-Ves la convocatoria, solicitas participar en ella con toda la documentación que te piden -Hacienda, Seguridad Social, carta de artesano, fotografías, currículum, memoria- y pasas una selección o no. Se pagan 2.300 euros en Artesanía de Madrid, en el paseo de Recoletos, por las 3 o 4 semanas de Navidades. Otras ferias, de colectivos que están haciendo algo por su pueblo, son gratis. A lo mejor, no ganas dinero, pero son muy agradecidos con el expositor.

- ¿Por qué escogió materiales alternativos?

-Me lo pedía el cuerpo y a la edad en que empecé no podía competir siendo la mejor orfebre o platera. Descubrí los hilos metálicos para tejer y, por convicción, empecé a usar materiales reciclados: corcho, plásticos diferentes, madera de deriva...

- Esa madera con tanto sufrimiento.

-Se recoge húmeda, grisácea, con arena negra y se hace magia cuando la limpias, lijas y tratas con cera natural de abeja. Toma forma y coge profundidad.

- ¿Donde yo veo basura o desechos usted ve joyas?

-O esculturas. Cada uno en su trabajo ve según su perspectiva.

- ¿Y cuando lo cuenta?

-Me preguntan si se nota o va un punto más allá. Intento que vaya dos puntos más allá. Tienen miedo de que hayas recortado un pececito en un plástico. Me gusta dar una vuelta más conceptual.

- ¿De dónde salen esas ideas?

-De dentro de uno, de un bagaje de ideas, conocimientos. Es mi entrenamiento de siempre. La niña que hacía los regalos de sus amigos porque no tenía dinero para comprarlos siguió haciendo cosas a lo largo de la vida.

- ¿Se aprecia la artesanía?

-Hay quien la valora mucho y quien dice "esto es como lo que hace la Encarni". Para los que les gusta lo que hago pero no se pone nada estoy creando objetos decorativos, figuras...

- ¿Qué tal su vida aquí?

-Cómoda y agradable, estamos en un sitio privilegiado con ventajas a las que ni siquiera estaba acostumbrada, como entrar en una tienda y que te digan: "Ya me lo pagarás". Es bueno para criar.

Tienen dos hijos. David, de 28, es físico teórico doctorado en la Universidad de Estocolmo. Alicia, de 24, acaba de graduarse en Física y quiere dedicarse a hacer prótesis robóticas de mano.

- ¿Estaba preparada para el nido vacío?

-Desde que nacieron me fui preparando. Hicieron el Bachiller aquí y se fueron a estudiar a Madrid. David se fue a Estocolmo porque la investigación en España está como está y porque allí toda la enseñanza es gratuita, incluso el máster, y hacer el doctorado es un trabajo remunerado.

- ¿Lo ve como fuga de cerebros o como emigración?

-Como fuga de cerebros. Es una barbaridad, no porque le pase a mi hijo sino porque socialmente es un desperdicio. Son cerebros que hemos criado y pagado los estudios entre todos y no tienen opciones para quedar ni se les pasa por la cabeza volver porque no hay dónde. Estoy muy orgullosa de que mi hijo haga lo que hace.

- Si tiene un nieto, le quedará muy lejos...

-Pues se va a verlo. Es un lugar precioso.

- ¿Cómo una licenciada de Historia del Arte y un arquitecto hacen dos físicos?

-Me gusta mucho cómo son mis hijos porque no son científicos puros, están interesados en la literatura, en el cine... David pinta genial, los dos tocan el violín, y Alicia, además, la guitarra y el bajo.

- ¿Han sido padres interesados en tener hijos interesados?

-Lo primero lo pusieron ellos. Nunca les impuse nada.

- ¿Se es artesana igual en Asturias que en Madrid?

-No lo sé. En Madrid hay más posibilidades de formación y acceso a sitios y a público, pero también más competencia. Quizá me vaya cuando corresponda.

- ¿Cuando su marido se jubile?

-Iremos donde la vida sea más fácil, también para ir y venir. No tenemos arraigo ni familia aquí.

- ¿Habrá reunificación familiar por Navidad?

-Media. Viene Alicia. En febrero tenemos que ir al doctorado de David y ponernos guapos.