El Colegio de Médicos de Asturias ha recibido con satisfacción la noticia de que la Fiscalía general del Estado ha abierto una investigación a Josep Pamiès, entre otros curanderos, como presuntos autores de un delito contra la salud pública por sus terapias con clorito de sodio -lejía diluida en ácido cítrico- para curar enfermedades tan graves como el cáncer. "Hay que poner las máximas trabas legales a estos desmanes", manifestó ayer el presidente del Colegio, Alejandro Braña.

El Colegio asturiano es uno de tantos con denuncias contra Pamiès, según su presidente, y consiguió que se suspendiesen la mayor parte de las charlas que el año pasado tenía programadas en la región. "Ese individuo se dedica a la practica de un fraude absoluto, con procedimientos peligrosos para la salud en sí mismos e indirectamente, porque una de sus bases terapéuticas es retirar cualquier tratamiento científico probado", advirtió Braña.