Hace ya varios años que se habla mucho de un problema con el pescado y el parásito del anisakis y ahora, desde hace poco, se puede hablar de una garrapata que puede hacerte alérgico a la carne, así que podemos estar hablando del "anisakis de la carne". Aquí te explicamos como eliminar el anisakis en el pescado.

Todo comienza con la picadura de una garrapata minúscula y que es la causante de que después de haber ingerido carne roja esta pueda sentarnos mal. Estamos ante el síndrome Alfa-Gal y, pese a que existen casos documentados desde los años 90, es ahora cuando más se ha acentuado este problema conocido también como "el anisakis de la carne".

Según los estudios las personas que tienen mascotas y las que disfrutan habitualmente del campo, así como ganaderos o los que vivan en entornos rurales, son quienes cuentan con más probabilidades de sufrir este mal. Este síndrome se encuentra localizado en la mayoría de los casos en la zona norte y de la cornisa cantábrica y así en la Andalucía Occidental.

¿Qué es el síndrome de Alfa-Gal?

En definición se trata de un tipo de alergia a la carne roja. Como ya hemos comentado todo comienza con la picadura de la garrapata estrella solitaria y que transmite en el cuerpo la molécula del azúcar llamada así, Alfa-Gal. Este proceso puede derivar en reacciones alérgicas al consumir carne roja.

Síntomas y signos del síndrome de alfa-gal:

- Ronchas y picazón en la piel, o piel descamada, eccema

- Hinchazón en los labios, rostro, lengua y garganta, u otras partes del cuerpo

- Sibilancia o dificultad para respirar

- Secreciones nasales líquidas

- Dolor abdominal, diarrea, náuseas o vómitos

- Estornudos

- Dolores de cabeza

- Anafilaxia, una reacción alérgica grave y potencialmente mortal que impide la respiración

Se trata de una alergia difícil de diagnosticar actualmente ya que sus reacciones tardan varias horas en ser visibles y por tanto en muchas ocasiones se pueden asociar a otro tipo de infecciones.

Algunos trucos para prevenir las picaduras de las garrapatas sería cubrirse el cuerpo si salimos a pasear por el monte, usar un repelente de insectos si nos encontramos en zonas en las que es posible encontrarnos con ellos, eliminar las posibles garrapatas de nuestras mascotas, incluso de nuestros jardines, ducharse nada más llegar a casa tras el paseo por el campo puesto que en muchas ocasiones las garrapatas se aferran al cuerpo, pero no actúan en el mismo momento. Si te encuentras con una garrapata aferrada a alguna parte de tu cuerpo usa unas pinzas para deshacerte de ella.