El Colegio de la Inmaculada de Gijón apartó de la docencia a un profesor -laico, no jesuita- tras conocer la denuncia por supuestos abusos sexuales de una alumna que en el momento de los hechos era menor de edad. Ocurrió hace aproximadamente una década, en el curso 2010-11, según las fuentes consultadas, y el maestro señalado compaginaba las labores educativas en el centro con las clases particulares en su domicilio. Allí acudían los alumnos del Colegio y fue en ese lugar donde se habría producido un supuesto caso de abuso.

La familia de la víctima se puso entonces en contacto con la dirección del centro que esta misma semana veía cómo la mancha de los abusos sexuales a menores en la Iglesia llegaba hasta Gijón. El martes se conocía que un jesuita destinado en Logroño contra el que existe una denuncia por un supuesto caso de abuso cometido durante su etapa en el colegio de la Inmaculada de Gijón había sido apartado y recluido en la Casa de Ejercicios de Villagarcía de Campos, en Valladolid, mientras se esclarecen los hechos, tanto por la vía judicial como por la eclesiástica. En este caso, los hechos se habrían producido en el desempeño de sus labores como profesor de Religión y coordinador de pastoral entre 2005 y 2008, cuando se encontraba destinado en el centro gijonés.

La denuncia contra el docente laico, cuyo caso sale ahora a la luz no llegó a materializarse en la vía judicial. Una vez que la dirección tuvo conocimiento que una de sus alumnas había sufrido abusos durante las sesiones de clases particulares en el domicilio del profesor, se procedió a investigar que había ocurrido así. La decisión, como ahora con el jesuita apartado de sus funciones en Logroño, fue cesarle de las labores educativas. El hombre, que entonces impartía una asignatura tecnológica y era coordinador de uno de los niveles educativos, abandonó su actividad en el centro. En la actualidad no tiene vinculación alguna. La alumna y víctima de este otro caso de supuestos abusos sexuales finalizó los estudios con normalidad en el Colegio y se optó por que no trascendieran los hechos para preservar su intimidad, confirmaron desde la Compañía de Jesús.

Ventanas de escucha

Fruto de estos acontecimientos recientes, la alerta y sensibilidad en la comunidad educativa se encuentra al máximo nivel. Ayer mismo se daba a conocer que se ha abierto una investigación en el colegio de Gijón por otro posible caso de abusos sexuales por parte de un docente. La comunicación llegó a través de las denominadas "ventanas de escucha" que han habilitado los jesuitas "para hacer llegar comportamientos impropios". Estos hechos se remontarían a hace cuatro décadas. "Una persona se dirigió a nosotros y lo investigaremos", aseguró un responsable de la Compañía.