La Fundación Ópera de Oviedo ya tiene nuevo director general: se trata del avilesino Celestino Varela, que procede de la empresa privada y que, antes de dedicarse a la gestión, protagonizó una notable carrera artística como bajo-barítono. El Patronato de la Fundación Ópera de Oviedo, presidido por Juan Carlos Rodríguez-Ovejero, anunció en la tarde de ayer el nombramiento de Varela, poniendo así fin a un proceso de selección que se alargó durante dos meses y en el que participaron otros 22 candidatos.
Con este nombramiento, la Fundación Ópera de Oviedo cubre la vacante dejada por Javier Menéndez a raíz de su salida para dirigir el Teatro de la Maestranza, que se concretó por sorpresa a mediados del mes de enero. Varela, que se incorporará a la Ópera de Oviedo en los próximos días, asumirá las competencias gerenciales y artísticas de la institución.
El gestor avilesino, muy conocido en los círculos musicales debido a su trayectoria previa como bajo-barítono, se reconocía ayer muy ilusionado por el nombramiento: "Estoy feliz de incorporarme a un proyecto como el de la Ópera de Oviedo, una de las temporadas más importantes de España y de mayor tradición de toda Europa. Tomar el testigo que me deja Javier Menéndez es un reto apasionante que asumo con muchísima ilusión y estímulo", asegura.
Varela destaca además que, por su origen, incorporarse a la dirección de la temporada ovetense conlleva un aliciente adicional. "Como asturiano, el privilegio es doble. Asumo el compromiso de trabajar con responsabilidad y ambición no solo por mantener sino también por acrecentar el prestigio y la personalidad de esta institución", afirma Varela, que se trasladará a Oviedo en los próximos días y cuya presentación en sociedad como nuevo director general de la temporada de Ópera se producirá este miércoles.
Barítono
La trayectoria vital y profesional de Celestino Varela dibuja el perfil de una persona idónea para asumir la dirección de la temporada ovetense. Nacido en Avilés, el 15 de abril de 1971, Valera se lienció en Derecho en la Universidad de Oviedo. En paralelo a sus estudios, estudió música y canto. Beneficiario de una beca de la Escuela de Ópera de Sabadell, Varela completó su formación con docentes como Luisa Chova, Carlos Chausson o Eduard Giménez antes de iniciar su trayectoria como cantante lírico profesional en 1999.
Con su voz de bajo-barítono y su talento escénico, Varela actuó en los teatros más importantes de España, desde el Liceo de Barcelona hasta el Teatro Real de Madrid, pasando por el Arriaga de Bilbao y, como no podía ser de otra forma, el Campoamor. De hecho, el avilesino actuó en la misma Temporada de Ópera que ahora va a dirigir: sin ir más lejos, Varela interpretó a Astolfo en el recordado montaje de "Lucrezia Borgia" de Donizetti ideado por Emilio Sagi y que, bajo la dirección musical de Paolo Arrivabeni, se representó en el Campoamor en diciembre de 2004.
La carrera de Varela sobre los escenarios concluyó en 2009, más allá de puntuales actuaciones como la que protagonizó en el pub Santa Cecilia de Avilés a finales de diciembre de 2015, compartiendo escenario con Ana Nebot, Pablo García-López, Paula Iragorri y, al piano, Mario Bernardo. Para entonces, Varela ya acumulaba varios años de experiencia en Intermezzo, empresa dedicada a la creación e intendencia de coros líricos, donde ejerció primero como director del departamento de producción y, entre 2013 y este mismo año, como gerente. Un cargo desde el que gestionó la implantación del Coro Intermezzo como Coro titular del Teatro Real de Madrid.
Varela ejerció además como responsable adjunto del Departamento Pedagógico del Teatro de la Zarzuela de Madrid, bajo la dirección artística de Paolo Pinamonti, centrándose en proyectos de creación de público futuro; además de gestionar refuerzos corales y giras para otros teatros como el Liceo de Barcelona o el Teatro Real de Madrid.
En 2017, Varela se incorporó como asesor estratégico de la Agencia Lerín Artists Management, una de las agencias de representación de artistas más importantes de España. Una labor que ha mantenido hasta su incorporación como director general de la Ópera de Oviedo.
