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La vida después de un ictus

Sanidad edita una guía para pacientes con el objetivo de reforzar su autonomía en casa: "Es un primer paso para humanizar la medicina"

Luis Miguel Jiménez, Roberto Riaño y Carmen Gómez, ayer, durante la presentación de la guía en el HUCA. FERNANDO RODRÍGUEZ

Luis Miguel Jiménez pensaba que lo peor ya había pasado: un ictus y seis meses postrado en la cama de un hospital. Pero con el alta en la mano tuvo que escalar una cima mayor. Empezaba en casa una "carrera de fondo"; de ingeniárselas para subir y bajar escaleras, de coger garbanzos a puñados para recuperar la movilidad en las manos... Tuvo que enfrentarse a un "nuevo mundo" sin "información de nada".

La Consejería de Sanidad presentó ayer la guía "Preguntas y respuestas sobre el ictus. Escuela de cuidados" para evitar que los pacientes y sus familiares se vean solos ante el peligro, como le pasó a Jiménez, actual formador del programa "Paciente Activo Asturias" (Pacas). "No es un documento de gran valor científico. Tiene el deseo de aportar a los enfermos herramientas para que puedan enfrentarse a ese mundo diferente. Queremos que esta guía sea un primer paso en el camino hacia la humanización de la sanidad", expresó Sergio Calleja, neurólogo del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA). El médico reconoció que "los avances técnicos son fundamentales, pero si no los reforzamos con la visión de los pacientes, no lo estamos haciendo bien". "A veces lo urgente quita el foco de lo importante: lo que viene después", añadió.

La guía, de la que ya se repartieron casi 2.000 ejemplares en papel y que cuenta con una versión en vídeo para reconocer los principales síntomas de la enfermedad, surgió de la necesidad de los propios pacientes. "Creamos la escuela de cuidados con el objetivo de que el enfermo lograse su autonomía y tras las charlas nos pedían hasta el Power Point", explicó la enfermera Carmen Gómez durante la presentación de la iniciativa en el HUCA. "Las familias nos demandaban un soporte en papel para poder consultarlo. Se puede perfeccionar y, de hecho, ya estamos en ello, pero el documento ayuda a que el paciente sea el protagonista de su rehabilitación", señaló por su parte el fisioterapeuta Roberto Riaño.

La guía -descargable a través de la web www.astursalud.es- da respuesta a todo tipo de preguntas: desde conceptos básicos de la enfermedad -al año la unidad del Ictus atiende 500 nuevos casos- hasta cuidados. En concreto, da consejos de alimentación e hidratación, movilidad, aseo, eliminación, vestimenta, sexualidad, comunicación, conducción, vuelta al trabajo, la familia y los recursos sociales.

Consejos para el enfermo y su familia

Consejos para el enfermo y su familia

¿Qué es el ictus?

Un trastorno brusco de la circulación cerebral que altera la función de una determinada región del cerebro de forma transitoria o permanente. El más frecuente es el ictus isquémico.

¿Cuándo se puede volver a comer?

El ictus produce con frecuencia parálisis de los músculos de la garganta o de la lengua y, con ella, una dificultad grave para tragar (disfagia). A consecuencia de ello, es posible que la persona afectada deba permanecer sin comer, administrándole sueros. Para evaluar su capacidad de tragar, un método sencillo es darle distintos volúmenes y viscosidades de agua con espesante (néctar, miel y pudding).

¿Cómo se pueden evitar las complicaciones derivadas de la inmovilidad?

1) Evitar pasar demasiado tiempo en la cama. 2) Si es posible, se utilizarán colchones y cojines antiescaras. 3) Si el paciente no se puede levantar, deberían realizarse cambios de postura cada dos horas. 4) Las movilizaciones deben realizarse siempre despacio. 5) El miembro paralizado es extremadamente frágil, así que debemos tratarlo con mucho cuidado; no tirar, por ejemplo, del brazo afectado para levantarse de la cama.

¿Cómo empezar a caminar?

Al principio suele ser necesario el apoyo de otra persona, que se situará en el lado débil. La ayuda puede realizarse de dos formas: el acompañante abraza al paciente por detrás o sitúa sus manos a ambos lados de la cadera y le acompaña en el cambio de paso cuando camina. Si el paciente puede deambular con bastón, primero avanzará este, después la pierna débil y finalmente la pierna sana.

¿Cómo asearse?

Las primeras semanas se aconseja que el paciente esté acompañado. A medida que recupere la fuerza y el equilibrio, se fomentará su autonomía con supervisión. Una silla cerca, a su altura, facilita que pueda lavarse la cara, peinarse o afeitarse de forma autónoma. Es preferible la ducha a la bañera y es conveniente colocar en ella una silla o taburete y un asidero en la pared.

¿El acto sexual aumenta el riesgo de sufrir otro ictus?

En general no, aunque es conveniente consultar al médico. Normalmente, se podrá reanudar la actividad sexual tan pronto como la persona se sienta preparada.

¿Se puede volver a conducir?

La persona que ha sufrido un ictus y presenta secuelas que puedan interferir en la conducción debe evitar ponerse al volante y comunicar su estado a la Dirección General de Tráfico.

¿Cuándo reincorporarse al trabajo?

Con frecuencia el paciente tiene prisa para volver a la rutina habitual, ansiando normalizar su situación, pero esa urgencia conduce a decisiones precipitadas y a sentimientos de angustia.

¿Qué papel debe jugar el cuidador?

El paciente va a atravesar tiempos difíciles. Es importante animarle y reforzar sus logros en positivo y su esfuerzo. Tratarle con calma, cariño y naturalidad a la hora de resolver los problemas que surjan.

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