Las celebraciones del Orgullo LGTBI arrancaron ayer en Asturias, con un tono bien distinto en las dos grandes ciudades de la comunidad. En Gijón la alcaldesa socialista Ana González institucionalizó la reivindicación del colectivo, colocando una bandera multicolor del balcón de la Casa Consistorial, y comenzaron los festejos del Orgullín del Norte en Deva. En Oviedo, el Ejecutivo de Alfredo Canteli, del PP, se mantuvo al margen: la bandera que identifica a lesbianas, gais, transexuales y bisexuales no colgó del Ayuntamiento, sino del edificio de enfrente, y la Plataforma Transmaricabollo asumió la organización de una manifestación a la que se sumaron cientos de personas, y que tuvo un notorio carácter antisistema.

La de Oviedo se presentó como una marcha por el Orgullo Crítico, convocada por las organizaciones Bujarra, Disex, Transire, Muyeres LBT, Meriendas Cuer y la Asociación Cultural L'Afoguín. Como explicó Marián Lago, de Disex Asturias, tenían la determinación de desmarcarse de las celebraciones del Orgullo "mercantilizadas por las grandes empresas", como la gran marcha de Madrid. Salieron a las siete de la tarde de la Estación del Norte, recorrieron la calle Uría y hacia las ocho acamparon en la plaza del Ayuntamiento, donde se improviso una fiesta y se leyó un manifiesto en asturiano -con traducción en lengua de signos-. Hubo alusiones a las consignas homófobas de la ultraderecha y se acabó al grito de "Fueu al sistema". Varios concejales del PSOE y de Somos se dejaron ver en la marcha.

En Gijón, la bandera arcoiris está colgada desde ayer del balcón principal del Ayuntamiento tras un acto reivindicativo en el que participaron todos los partidos políticos, a excepción de Vox y Ciudadanos. En el caso de la formación naranja se debió a una cuestión accidental, pues fuentes del partido expresaron su apoyo al Orgullín del Norte. El edil Rubén Pérez Carcedo, de Ciudadanos, sí acudió al izado de bandera en el camping de Deva, donde se concentran las actividades de este fin de semana en Gijón.

"Serán tres días multicolor para reivindicar, normalizar y visibilizar al colectivo LGTBI", declaró Yosune Álvarez, presidenta de Xega. Álvarez alertó de "un repunte de agresiones homófobas" en torno a esta fecha, en la que este año se conmemora el 50 aniversario de las revueltas de "Stonewall" en Nueva York, que dieron lugar a las celebraciones del Orgullo Gay. "Todos los años pasa, porque pica ver la pluma en la calle, y todos los años hay persecuciones por las calles de Gijón", denunció Yosune Álvarez, que hoy recogerá la Medalla de Plata de la ciudad a Xega. La activista aprovechó para denunciar "los nuevos aires políticos que trae la extrema derecha". "Los discursos de odio hacen daño institucional, echan para atrás medidas sociales y dan fuerza en la calle a todas las personas para acciones de odio", reflexionó.

Yosune Álvarez se refirió a la polémica de Oviedo, en torno a la colocación de la bandera. "Si la pones en el Ayuntamiento, la pones; lo otro es un lavado de cara evidente. Los espacios son simbólicos pero la simbología es muy importante", comentó. Álvarez estuvo arropada por la alcaldesa Ana González. La regidora gijonesa se refirió a la inclusión como a una "seña de identidad de Gijón" y se comprometió a llevar a cabo políticas en favor del colectivo LGTBI.

La manifestación del Orgullín del Norte, bajo el lema bajo el lema "Ley integral trans ya", saldrá esta tarde, a las cinco, del Paseo de Begoña. Al acabar habrá una fiesta de prau multicolor en Deva.