El historiador Juan Pérez Carrandi ha localizado, en un enclave de la costa llanisca conocida como la explanada de La Moria, los restos de lo que parecen ser dos estructuras militares, probablemente de carácter temporal y que, por su morfología, podrían ser incluso de época romana. Un hallazgo que, de confirmarse, podría ser muy relevante para comprender el proceso de romanización de la región.
Pérez Carrandi, doctor en Historia especializado en el mundo romano, localizó a finales de julio, a través de una herramienta de mapeado, el trazado de una estructura cuadrada, de 50 metros de lado, próxima a la costa entre Cuevas del Mar y Salmorieda. A fin de comprobar si realmente eran los restos de algún tipo de estructura, se desplazó al lugar y, por el camino encontró un talud artificial en "L", de grandes dimensiones, con una anchura estimada de metro y medio y una altura aproximada de 40 centímetros, en la explanada de La Moria.
Una vez que halló esta segunda estructura, el historiador contactó con la Dirección General de Patrimonio Cultural, que le comunicó que desconocían la existencia de restos arqueológicos en esa zona. Pero en una visita posterior, Pérez Carrandi localizó un tercer tramo de talud, en el que constató la existencia de una cata con retirada de la capa vegetal que cubría el talud.
Tras hablar con el administrador de los terrenos -que le comunicó que no se había autorizado intervención alguna- y después de una nueva, e infructuosa, consulta ante la Dirección General de Patrimonio Cultural, el historiador habló con el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona), que realizó un informe sobre las posibles intervenciones arqueológicas irregulares en La Moria. Acto seguido, Pérez Carrandi registró una petición ante el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Llanes solicitando la apertura de diligencias para proteger los restos y evitar una posible intervención no autorizada que los dañase de forma irreparable.
A juicio del historiador, los restos son indicativos de una estructura de carácter militar, posiblemente de época romana. De confirmarse que realmente se trata de un campamento de esa época, podría ratificar las teorías de algunos investigadores sobre un hipotético desembarco romano en la costa oriental de Asturias. Hasta la fecha, no se han documentado otros enclaves de carácter militar de época romana en el Oriente asturiano.
Otros investigadores consultados por este periódico se mantienen cautos ante este posible hallazgo. La ausencia de otros restos similares en la zona y la continuidad de la morfología de las estructuras militares durante varios siglos (prácticamente hasta que el desarrollo de la artillería y la locomoción revolucionan el desempeño de la infantería) son argumentos que invitan a la prudencia, a ojos de estos investigadores. Pero todos coinciden en la necesidad de proteger los restos y de hacer un examen científico para corroborar la relevancia de este posible yacimiento.
