Comenta Ramón Eliseo, el director del instituto público Alfonso II, uno de los mayores de Oviedo, que para su centro participar en el programa "Toma la palabra", con el que la Fundación Princesa de Asturias acerca sus premios a los estudiantes, "supone una magnífica oportunidad educativa" y todo "un lujo". María Dolores Granda dirige la Escuela de Educación Infantil de La Mata, en Grado, un centro con nueve alumnos, que, ante la perspectiva de conocer a los ganadores de una nueva edición de los premios, emprenden el curso "nerviosos e inquietos". "Toma la palabra' nos ofrece proyectos muy atractivos para los niños, que afrontan con mucha ilusión e involucrando a los padres", comenta la profesora. Por si fuera poco, tienen por delante la perspectiva de conocer a todas esas personalidades. Granda subraya que ese encuentro "aporta un aprendizaje que no dan los libros". Para la pequeña escuela de La Mata, el programa didáctico de la Fundación Princesa de Asturias es "una ventana al mundo".

"Toma la palabra", una iniciativa que ya va por la quinta edición y que se extiende por todos los niveles de las enseñanzas obligatorias, al bachillerato y la Formación Profesional. Ha llegado a 16.000 alumnos asturianos, y a 176 centros. Su objetivo es simple: trasladar a las aulas la obra y la trayectoria de los galardonados en cada edición de los premios Para ello, cada año, hay actividades. Los deberes de este curso consisten, a elegir, en comentar las obras maestras del Prado, resolver acertijos aplicando la capacidad deductiva que la Khan Academy contribuye a desarrollar, redactar listas de valores inspirándose en la esquiadora Lindsey Vonn, conectar con Siri Hustvedt a través de la literatura con un relato sobre la lectura. También se pide a los estudiantes que se pongan en la piel de un emigrante, para que entiendan mejor el trabajo del sociólogo Alejandro Portes. Pueden hacer un cómic y montar un herbario, para adentrarse en el mundo de las científicas y activistas por el medio ambiente Joanne Chory y Sandra Myrna Díaz, o indagar en la personalidad de tres prohombres de la ciudad de Gdansk, en Polonia.

En La Corolla, en Gijón, la jefa de proyectos, Sonia Segarra, afirma que la comunidad educativa está "de celebración" con este programa. El centro participó en la primera edición de "Toma la palabra", con una actividad sobre la Wikipedia. "Fue una gran oportunidad, que acogemos cada curso con ilusión y respeto", sostiene. Estos días, andan todos muy ocupados indagando sobre los protagonistas de esta edición. Han descubierto, pone como ejemplo su profesora, que para Siri Hustvedt "soñar es otra forma de pensar".

Rosa Rueda, jefa de estudios del colegio Clarín, de Gijón, opina que "es importante dar visibilidad a los premios". Los galardonas encarnan valores que "son muy interesantes, un modelo para ellos, y para la sociedad", afirma. Los niños del centro de Primaria preparan un herbario y los mayores, de sexto curso, buscan personalidades ilustres de Gdansk, y otras en España que se les puedan comparar. Otro de los centros que participan este curso en "Tomar la palabra" es el Clara Campoamor de Langreo, que ha elegido, entre todas las opciones posibles, la de "FascinArte", comentando con los chavales en las aulas obras como "El Caballero de la mano en el pecho" del Greco, "La familia de Carlos IV" de Goya o "Chicos en la playa" de Soroya. "Siempre nos han resultado enriquecedoras todas nuestras participaciones" en el programa, asegura la directora del Clara Campoamor, Marta García, y todas les dejan buenos recuerdos, como el de la visita el año pasado de la gente de Amref Salud África, la organización ganadora del premio de Cooperación Internacional en esa edición, y que participó en un coloquio con los niños.