Lindsey Vonn, Premio Princesa de Asturias de Deportes 2019, ha acudido a Avilés para encontrarse con estudiantes de Primaria y ESO de centros educativos asturianos participantes en el programa "Toma la palabra. Valores de élite", basado en el aprendizaje de valores a través de la práctica deportiva. Al inicio del acto la esquiadora ha firmado en el libro de honor de la Fundación Deportiva Municipal (FDM) de Avilés, una ciudad que tiene a gala la promoción a ultranza del deporte base. La Premios Princesa de los Deportes explicó que al ver la nómina de personas galardonadas "me doy cuenta de que se han concedido a personas que cambian el mundo de hoy; yo no sé si esquiar puede servir a ese objetivo pero espero que al menos os inspire a todos para seguir trabajando duro".

La esquiadora olímpica explicó a los jóvenes que el éxito es imposible sin la ayuda de la gente que te rodea. "Sin mi familia, mis preparadores, mis entrenadores y quienes me cuidaron cuando me lesioné no hubiera obtenido ningún triunfo. Nadie es una isla y nadie puede obtener un gran logro en solitario; los éxitos son fruto del trabajo en equipo".

Así mismo, Vonn, explicó que "esquiar me ha hecho mejor persona, me ha enseñado a ser más honesta y me ha aportado capacidad de sacrificio". "Las cicatrices nos hacen más fuertes; yo tengo 12 en mi cuerpo que lo atestiguan".

Antes, la esquiadora estadounidense Lindsey Vonn, premio "Princesa de Asturias" de los Deportes, fue recibida a las puertas del Hotel de la Reconquista de Oviedo por la directora del la Fundación, Teresa Sanjurjo. Vonn apareció completamente de blanco en la puerta del Hotel de La Reconquista y, tras firmar esquís, autógrafos y atender a una decena de fans, procedió a lanzar su mensaje. Un mensaje que va más allá del deporte y que está dirigido en primer lugar a las mujeres. "Quiero ayudar a las mujeres, que están infrarrepresentadas", dijo una de las esquiadoras más premiadas de la historia. La campeona olímpica y de mundo aseguró que uno de sus objetivos ahora que ha dejado la práctica deportiva de manera profesional es "empoderar a las chicas jóvenes y mostrar a las mujeres todo lo que pueden hacer".

Así fue el posado de la esquiadora Lindsey Vonn a las puertas del Recionquista

Así fue el posado de la esquiadora Lindsey Vonn a las puertas del Recionquista

A su vez reconoció a su vez que para ella es todo un privilegio recibir el premio "Princesa de Asturias" de los Deportes y estar rodeada de "tantas personas que cambian el mundo". En especial destacó la inspiración que le supone estar junto a mujeres como Joanne Chory y Sandra Myrna Díaz, que han logrado el galardón en el apartado de Investigación Científica y Técnica.

Explicó que no sabía si iba a poder venir a recoger el premio pero que cuando supo que éste se entregaba el día de su cumpleaños (mañana cumple 35 años) supo que era una señal y que tenía que desplazarse hasta Oviedo: "No sabía si iba a poder hacer este viaje pero mi cumpleaños fue una señal. Estoy encantada de estar en España, nunca había estado tan al norte, solo en las montañas del sur", añadió.

También puso su ejemplo, el de alguien que ha superado todas las lesiones, y que a pesar de ello ha sido capaz de seguir ganando. "El éxito es muy fácil pero cuando te caes y te tienes que levantar es mucho más difícil y yo me he tenido que levantar muchas veces", señaló. Ahondando en el tema de las lesiones, Vonn explicó que al final tenía "el cuerpo descompuesto" y que eso finalmente la obligó a retiarse: "La de 2013 fue la primra de una serie de lesiones, mi motivación entonces era llegar a los Juegos, pero al final acabé perdiendo dos temporadas, luego volví, gané, y creo que en general he tenido que luchar más que el resto. Lo pude hacer porque para mí el esquí no es un trabajo pero al final tuve que tomar la decisión porque tuve demasiadas lesiones, ligamentos, cruzado, mi cuerpo se estaba descomponiendo. Solo he esquiado dos veces dede que me jubilé. He pasado tanto tiempo entrenando que ahora tengo que descansar", explicaba.

Vonn sorprendió ayer por su aparición en Asturias. La deportista adelantó un día su llegada a Oviedo, acompañada por sus hermanas, Laura y Karin.