Si hay un plato que a pesar de no ser uno de los tradicionales de Asturias se ha puesto de moda en los últimos años ese es, sin duda alguna, el cachopo. Casi todos los turistas y muchos asturianos recorren cada fin de semana restaurantes de la región buscando este bocado que suele ser servido con mimo por parte de los hosteleros asturianos. Y decimos que suele porque no siempre es así.

Hace unos días un cliente de un establecimiento asturiano situado en Avilés colgaba un comentario sobre un cachopo que no pasó desapercibido y que fue muy valorado en redes. “No lo pude ni comer, fue el peor que me han puesto jamás”, relataba. Pero ¿cuál era la razón de su disgusto o de su malestar con el plato?.

“Aquello no llevaba ni jamón, el queso no se veía por ningún lado y la carne tenía un sabor ácido”, sentenció este cliente dejando claro que, evidentemente su intención era la de no volver a pisar ni una sola vez más el restaurante en cuestión. Algo que, a juzgar por su opinión dejada en una conocida página web, a buen seguro le va a agradecer su estómago.

Los dueños de locales y restaurantes suelen quejarse de la poca fiabilidad que a su juicio tienen todo este tipo de páginas web en las que de una forma o de otra los clientes dejan sus opiniones sobre las experiencias que han tenido en determinados locales comerciales. Los empresarios aseguran que nunca se exige ninguna prueba de compra por lo que detrás de las opiniones más negativas pueden situarse, por ejemplo, empresarios de la competencia. En este sentido los hosteleros y hoteleros llaman a ser prudentes.

Pero lo cierto e que guste o no este tipo de páginas tiene cada vez más aceptación. Y a pesar de que es cierto que no s exige ni una prueba de compra ni absolutamente ningún justificante que indique que un cliente ha estado en el negocio en cuestión (sólo hay que registrarse en la web dando unos datos personales que incluso puede ser falsos), cada vez más gente consulta estas páginas antes de llamar y reservar una comida o una cena o antes incluso de desplazarse un fin de semana a un destino concreto para pasar unos días de descanso. Lo que está claro es que a mucha gente le ayudan para hacerse una idea de lo que se van a encontrar.