La infanta Pilar de Borbón, hermana del rey emérito, Juan Carlos I, y tía de Felipe VI, fue nuera y suegra de asturianos. Con su matrimonio en 1967 en Lisboa con Luis Gómez-Acebo Duque de Estrada, hijo de la llanisca Isabel Duque de Estrada y Vereterra, novena marquesa de la Deleitosa, Pilar de Borbón (nieta del rey Alfonso XIII e hija del aspirante al trono, don Juan de Borbón, conde de Barcelona, y de su prima, María de las Mercedes de Borbón) emparentó por tercera vez a los Borbones con dinastías del Principado.
El matrimonio de la infanta Pilar y Luis Gómez-Acebo, vizconde de la Torre, se ofició en la iglesia del Monasterio de los Jerónimos de Belém (Lisboa). Tras el enlace nupcial, se celebró un cóctel en Cascais, cerca de Estoril, en la desembocadura del río Tajo, lugar de residencia de monarquías europeas destronadas, entre ellas los Borbón, entonces en el exilio. Según las crónicas lisboetas de la época, el acontecimiento constituyó la ceremonia propia de una boda real, con la presencia de 200 representantes de casas reales. Don Juan otorgó a su hija, con motivo de su boda, el título de duquesa de Badajoz.
El contrayente era hijo de Jaime Gómez-Acebo y Modet, financiero de origen cántabro que fue presidente entre 1959 y 1970 del entonces poderoso Banco Español de Crédito (Banesto), como ya lo había sido entre 1917 y 1932 su progenitor, el financiero y dos veces ministro de la monarquía José Gómez-Acebo Cortina, marqués de Cortina. Un cuñado de Pilar, Ricardo Gómez-Acebo, fue a su vez vicepresidente del Español de Crédito entre 1987 y la crisis del banco, en 1993, y durante ese tiempo, bajo la presidencia de Mario Conde, la infanta, ya entonces viuda, se involucró en el organigrama de la Fundación Banesto.
La madre de Luis Gómez-Acebo y suegra de la infanta Pilar, la llanisca Isabel Duque de Estrada y Vereterra, formaba parte de la alta aristocracia asturiana, con fuerte arraigo en el Oriente de la comunidad. Isabel Duque de Estrada era hija del conde de la Vega del Sella, Ricardo Duque de Estrada y Martínez Morentín. Su boda con Jaime Gómez-Acebo Modet se celebró en Llanes en 1927.
Las dos veces precedentes en las que miembros de la dinastía Borbón habían enlazado con la aristocracia asturiana habían ocurrido un siglo antes, en los años 50 del siglo XIX, cuando los hermanos Fernando y María Cristina de Muñoz Borbón contrajeron matrimonio con los asturianos Eladia y José María Bernaldo de Quirós y González-Cienfuegos, hijos de los marqueses de Camposagrado. Fernando, conde de Casa Muñoz y vizconde de la Alborada, y María Cristina, marquesa de Isabela y vizcondesa de la Dehesilla, eran hijos de la que fuera reina regente María Cristina de Borbón-Dos Sicilias (madre de Isabel II) y de su segundo marido, el miembro de la guardia real, Fernando Agustín Muñoz Sánchez, que fue ennoblecido como duque de Riánsares. Otro Muñoz Borbón (Juan), futuro duque de Tarancón, casó a su vez con la asturiana, Ángeles Cañedo.
Los siguientes enlaces de los Borbón con familias asturianas se produjeron con los matrimonios de dos de los cinco hijos de la infanta Pilar (Simoneta Gómez-Acebo Borbón estuvo casada con el productor musical José Miguel Fernández Sastrón, nieto del empresario asturiano Pepín Fernández, fundador de Sederías Carretas y Galerías Preciados, y Bruno Gómez-Acebo Borbón fue marido de la modelo astur-gallega Laura Ponte Zapico) y con el matrimonio del rey Felipe VI (entonces, príncipe de Asturias) con la periodista ovetense Letizia Ortiz Rocasolano.
