Un octogenario mató a su mujer en el municipio lucense de A Pastoriza y posteriormente se quitó la vida, en lo que podría convertirse en el sexto crimen de violencia machista de 2020 en España. La mujer, Manuela Iglesias Fernández, de 79 años, y el supuesto agresor, Hortensio Onega, de 81, que se suicidó después del crimen, residían en una casa unifamiliar junto a su hija, su yerno, una nieta y su novio.

Fueron la nieta y su pareja los que encontraron el cadáver de la mujer, tendida boca arriba en el suelo de la cocina, alrededor de las 20.30 horas del sábado. La mujer presentaba un fuerte golpe en la cabeza y abundante sangre, además de varios cortes en la cara y cuello. Los investigadores hallaron cuatro cuchillos manchados de sangre en la cocina, tres de ellos sobre una encimera y un cuarto próximo al cuerpo de la víctima.

En el exterior encontraron el cadáver del supuesto asesino bajo una ventana abierta por la que se pudo precipitar. El hombre, que carecía de antecedentes por violencia machista, tenía también cortes en una muñeca y una sola zapatilla, idéntica a otra que estaba en la cocina.

De confirmarse que se trata de un nuevo asesinato machista, se elevarían a 1.039 las víctimas mortales desde 2003, cuando se inició el registro.