Es una de las referencias nacionales del teatro para la infancia y la familia. La albaceteña Rosa Díaz Martínez-Falero es, también, una de las protagonistas de la vigésimo novena edición de la Feria Europea de Artes Escénicas para Niños y Niñas (Feten), que se clausura mañana. Disfruta en Gijón de un doble homenaje: una exposición que repasa sus cuatro décadas como actriz, directora y productora; ayer, además, la Association Internacionale du Théâtre pour l'Enfance et la Jeunneusse (Assitej-España) le entregó, en el Centro Antiguo Instituto, su premio nacional. "Este tipo de teatro me dio la posibilidad de hacer lo que ha dado la gana", aseguró la artista poco antes. Un canto a la libertad de estilo y a la mixtura de disciplinas que ha encontrado en espectáculos pensados para públicos muy amplios.

Rosa Díaz, fundadora en 2008 de la exitosa compañía granadina "La Rous Teatro", fue premiada por el Ministerio de Cultura hace nueve años con el Premio Nacional de Artes Escénicas para la Infancia y la Juventud. Sus propuestas han logrado un par de los galardones principales de Feten. Habló ayer de la feria gijonesa: "Es el único sitio en el que nos juntamos todos los que nos dedicamos a este tipo de teatro, así, en una sola ciudad, y eso es algo fundamental para nosotros; tiene que existir siempre".

No blasona de nada, pero sus cuarenta años de carrera teatral le han dado una experiencia y una perspectiva únicas. Estuvo por ejemplo en la compañía "Ur Teatro" o en "Els Comediants". Con estos últimos hizo la "Cabalgata" de la Expo sevillana de 1992. Instalada en Granada, fundó primero "Lavi e Bel" y después "La Rous Teatro". Está considerada como una renovadora del teatro para la infancia y la familia.

"Todas las compañías han hecho y hacen este tipo de teatro como una forma de superviviencia; en un momento determinado me di cuenta de que era lo que deseaba hacer y a él me he dedicado en exclusiva durante los últimos quince años", contó Rosa Díaz. Y añadió: "Me fascina por la sinceridad del público".

La artista se mostró de acuerdo con que el teatro para la infancia y familia se ha convertido en un apasionante campo de investigación y experimentación, "aunque nunca se ha pagado". "Ahora mismo hay una muy viva mezcla de lenguajes, una fusión que es un lujo; el circo, en mi caso, me ha abierto otros caminos", subrayó.