La expansión del coronavirus sigue desafiando todas las previsiones del Gobierno central. El pasado viernes, cuando anunció la intención de decretar el estado de alarma, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, afirmó: "No cabe descartar que en la próxima semana alcancemos los más de 10.000 afectados". Es una cifra que prácticamente se alcanzó en la jornada de ayer. Según los datos del conteo en directo del número de infectados a nivel mundial, en España se registraban, al cierre de esta edición, un total de 9.942 casos confirmados de infección por coronavirus. Un total de 342 personas han perdido ya la vida en el conjunto del país por la enfermedad.

Las cifras indican que España es ya el cuarto país del mundo con mayor número de infectados y de fallecidos tras China, Italia e Irán, y por delante ya de Corea del Sur, cuya forma de enfrentar de manera temprana y radical la enfermedad (lo que, entre otras cosas, ha permitido reducir el porcentaje de fallecidos por debajo del 1% de infectados: 81 entre más de 8.200 contagiados) ha sido puesta como ejemplo a seguir por las autoridades sanitarias. Más preocupante es el hecho de que España sea, a día de hoy, el segundo país en todo el mundo donde se registran mayor número de casos nuevos, solo por detrás de Italia. Entre el domingo y el lunes se registraron más de 1.300 nuevos casos en el país, y a lo largo del día de ayer cerca de 900 más.

El problema es que la velocidad de contagio no deja de crecer, lo que extrema la presión sobre el sistema sanitario. Y el panorama no va a mejorar en las próximas jornadas. "La epidemia todavía va a crecer unos cuantos días, no sabemos si serán tres, si serán dos o si serán siete", afirmó ayer el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, quien aseguró que el cumplimiento "a rajatabla" de las medidas de distanciamiento social impuestas por el Gobierno central puede tener un impacto "rápido y drástico" sobre la curva de contagio del coronavirus, haciendo descender el porcentaje de nuevos casos de forma constatable en unos pocos días. Además ha admitido que han derivado a cuadros graves personas que no se encontraban entre los grupos de riesgo.

Aparte de las medidas de contención, los investigadores españoles trabajan para encontrar mecanismos efectivos para luchar contra la pandemia. Científicos de la Universidad de Valencia y la Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunidad Valenciana anunciaron ayer que han obtenido los primeros genomas completos del coronavirus SARS-CoV2, el que produce el COVID19, en España.

La secuenciación del genoma del virus permite conocer las mutaciones que ha sufrido desde que comenzó la epidemia. La conclusión de los investigadores valencianos es que las cepas activas en el país no tienen ninguna mutación asociada a una mayor virulencia o letalidad, ni tampoco alguna propiedad interesante desde el punto de vista clínico, y proceden de vías de transmisión diferentes.

Esta investigación se suma al esfuerzo de otros laboratorios de todo el mundo que están tratando de averiguar cuáles han sido las vías de transmisión del virus y cómo se extienden sus diferentes linajes. En las próximas semanas, el equipo que ha secuenciado este primer genoma seguirá analizando muestras de pacientes, para precisar más las vías de transmisión, lo que puede ayudar a las autoridades sanitarias a controlar mejor la expansión del virus.

Por su parte, el investigador Oriol Mitjà, de la Fundación Lucha contra el Sida, ha puesto en marcha, en colaboración con la Generalitat de Cataluña, un primer ensayo clínico en España para tratar a los pacientes infectados con el coronavirus con antirretrovirales empleados en el tratamiento del sida. El ensayo va dirigido a casos positivos de carácter leve, un total de 195, y a otras 3.000 que han tenido contacto con ellas. Para el ensayo se ha seleccionado a personas que residen en la Conca d'Òdena y la zona Metro Nord de Barcelona, dos de las zonas de Cataluña con mayor número de afectados.

China ha anunciado que mandará, de forma urgente, material médico a España, tal y como ha hecho ya en Italia. Al igual que en el país transalpino, es probable que en los próximos días se desplacen también desde China médicos expertos en la lucha contra el coronavirus.