La compañía asturiana Alsa, líder nacional en transporte de viajeros y con un millar de empleos en el Principado, está estudiando "distintas medidas" laborales, tales como "reducción de jornadas o suspensión de contratos" para paliar la caída de la facturación y de la actividad como consecuencia del confinamiento de la población y de la restricción de la movilidad decretadas por el Gobierno. Fuentes de Alsa explicaron que "se buscarán siempre las fórmulas que causen el menor impacto en el empleo" y que sean "proporcionales a la reducción de la actividad". La empresa precisó que ninguna de las opciones conllevará despidos.

Alsa está experimentando una caída del 70% en su volumen de negocio en España desde la declaración del estado de alarma y del 40% en Marruecos por las restricciones adoptadas también en el país norteafricano, según comunicó ayer a la Bolsa de Londres el grupo británico National Express (NX), matriz de Alsa.

NX informó que por la tipología de sus contratos ("muchos de los cuales brindan protecciones y garantías de ingresos mínimos"), el 40% de la facturación de Alsa está protegida del impacto de la pandemia.

Por otro lado la aerolínea Volotea, con sede social en Asturias, ha suspendido su actividad hasta el próximo 8 de abril ante las restricciones del estado de alarma decretado en España y las medidas de contención en Francia e Italia, y ha presentado un expediente de regulación temporal de empleo para sus 1.100 empleados.