Las compañías distribuidoras de electricidad ofrecen en Asturias la posibilidad de que los consumidores reduzcan sin coste la potencia de luz que tienen contratada, cambio que permite ahorrar en el recibo a los autónomos y empresas que están sin actividad por el estado de alarma. Esta opción, indicaron las fuentes consultadas en el sector, puede ser atractiva para muchos negocios. Salvo que sus instalaciones eléctricas tengan más de veinte años, porque en ese caso se verían obligados a asumir costes importantes (el del boletín de instalador entre ellos) cuando la situación se normalice y suban de nuevo la potencia contratada.

Fuentes de las distribuidoras de EDP (e-Redes) y de Viesgo, las dos principales que operan en Asturias, confirmaron que sus clientes tienen esa posibilidad de modificar la potencia contratada sin pagar los llamados derechos de enganche. En otras circunstancias, el coste es de nueve euros. Lo realmente caro es subir la potencia: unos 45 euros más IVA por kilovatio. Ello puede suscitar la duda acerca de si bajando la potencia ahora se puede incurrir después en un coste muy superior al ahorro conseguido bajándola durante estos días. Fuentes de EDP confirmaron que, en el caso de su distribuidora, quienes se acojan a la modificación de potencia no pagarán ni cuando la bajen ni cuando restablezcan la que tenían una vez el negocio o pyme recupere la actividad.

Viesgo, no obstante, previno sobre la siguiente situación que se podría dar: "Los clientes que tengan instalaciones antiguas y que no tengan un boletín actualizado desde hace más de 20 años, si disminuyen la potencia, cuando posteriormente soliciten recuperar la potencia inicial será necesario que presenten un nuevo boletín de instalador, ya que es un requerimiento de las comunidades autónomas que por el momento no ha sufrido modificaciones". La potencia contratada supone, por lo general, hasta el 50% de la factura de la electricidad.