Pequeño aumento del número de muertos (de 22 a 25); incremento contenido de la cifra de ingresados en planta y en cuidados intensivos, y asumible crecimiento (un 17,6 por ciento) del volumen de infectados. Así evolucionó ayer la pandemia de COVID-19 en el Principado, que además pudo celebrar una buena noticia: el primer parto de una mujer afectada por el nuevo coronavirus.

En la mañana de ayer, y tras un espléndido trabajo de los profesionales de la sección de Obstetricia del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), llegaba a este revuelto mundo un bebé cuya madre sumaba 33 semanas de gestación. La mujer está infectada por el virus originario de Wuhan, y esta circunstancia obligó a los médicos y enfermeras a extremar los protocolos de prevención. El alumbramiento se produjo mediante una cesárea programada. "Madre e hijo se encuentran bien", comunicó unas horas más tarde la Consejería de Salud. Según testigos presenciales, en los pasillos del HUCA se respiraban, casi a partes iguales, satisfacción por el logro y tensión por las dificultades que entraña moverse por un territorio desconocido.

Entre tanto, según el parte estadístico que cada noche ofrece la Administración regional, Asturias acumulaba a las 20.00 horas de ayer 779 casos de COVID-19, lo que significa 117 más que el día anterior (17,6 por ciento de aumento). De ellos, 719 son cuadros activos, 35 pacientes se han curado (5 más que el lunes) y 25 han muerto (frente a los 22 del lunes, día en el que se había registrado la elevada cifra de 10 óbitos).

En cuanto a hospitalizados, anoche eran 166 en planta y 29 en unidades de cuidados intensivos (UCI), frente a los 158 y 23 del día anterior. "El Laboratorio de Microbiología del HUCA, destacó la Consejería de Salud.

En el conjunto de España, las cifras continúan ascendiendo a un ritmo preocupante. Según los datos del Ministerio de Sanidad, se han registrado ya 2.696 muertes y casi 40.000 contagios, con incrementos superiores a los de Asturias. ¿Lo más novedoso? Que Cataluña ha tomado el relevo a Madrid como la comunidad que más casos nuevos de coronavirus diagnostica. El salto se produjo por primera vez el lunes y se confirmó ayer, martes. No obstante, Cataluña sigue aún lejos en datos absolutos de Madrid, gran epicentro de la pandemia en España.

¿Qué sucede, mientras tanto, en Asturias? En el Hospital Universitario San Agustín, de Avilés, estaban ayer acondicionando la sexta planta sur para dar cabida a posibles pacientes infectados por el COVID-19. A esta planta se suman otras tres: la tercera, cuarta y quinta sur, el ala más próxima al servicio de Urgencias. El número de ingresados por COVID era ayer de 14, según ha podido saber este diario. La buena nueva es que, por fortuna, la UCI contaba con "bastantes huecos libres". Algunos trabajadores definieron la situación de "calma chicha antes de la tempestad". Como en otros hospitales asturianos, el aparcamiento del Hospital San Agustín es desde ayer gratuito para los trabajadores. Como la gratuidad de las televisiones para los pacientes, son medidas que pretenden hacer más llevadera la importante crisis sanitaria.

En Gijón, el Hospital de Cabueñes habilitó ayer una planta más, sumando ya cinco, para albergar a pacientes con coronavirus o sospechosos de padecerlo. Sigue sin abrirse, de momento, parte de la planta baja que podría servir como ampliación del área de Urgencias en los próximos días. Por otra parte, en los centros de salud de la ciudad se sigue respirando cierta calma. Uno de los fallecidos el lunes por COVID-19 es el gijonés Tomás Gallego Oterino, muy conocido en la ciudad por regentar durante años la Autoescuela Tomás. A sus 87 años, ha dejado dos hijos y dos nietos.