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JUAN JOSÉ PÉREZ | Director operativo del nuevo hospital de Ifema

"De la gente que trabaja en Ifema nadie pregunta ni cuándo ni cuánto va a cobrar"

"La principal dificultad para montar el hospital de 1.400 camas son los gases medicinales, no hay material en Europa y es difícil traerlo de China"

Juan José Pérez Blanco, exgerente del HUCA y director operativo del nuevo hospital de IFEMA: "Nadie me ha preguntado cuánto va a cobrar"

Juan José Pérez Blanco, exgerente del HUCA y director operativo del nuevo hospital de IFEMA: "Nadie me ha preguntado cuánto va a cobrar"

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Juan José Pérez Blanco, exgerente del HUCA y director operativo del nuevo hospital de IFEMA: "Nadie me ha preguntado cuánto va a cobrar" Pablo Álvarez

Juan José Pérez Blanco fue gerente del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) entre octubre de 2011 y junio 2012, con el Gobierno regional de Foro Asturias. "Estuve poco tiempo en Asturias, pero cogí mucho cariño a los asturianos", asegura. Ingeniero industrial nacido en Olpe (Alemania), en 1973, tras dejar el HUCA fue nombrado director de gestión del Hospital Universitario La Paz (Madrid) y actualmente es director general de Hospital Majadahonda S. A., sociedad concesionaria que gestiona los servicios no sanitarios del también madrileño Hospital Puerta de Hierro (como la Gispasa del HUCA, pero no pública, sino privada). El pasado viernes fue nombrado por el consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, director operativo de la construcción exprés de un hospital de 1.396 camas en Ifema, el gran recinto ferial de Madrid. Con este equipamiento se pretende, a partir de mañana o pasado, aliviar el colapso que sufren los hospitales de la comunidad autónoma como consecuencia de la pandemia de COVID-19.

- ¿Cómo ve el paisaje global?

-La situación es muy complicada. Esto no ha pasado desde 1918, cuando la gripe española. Es una pandemia a nivel mundial de unas proporciones brutales, y nos ha pillado a todos con el pie cambiado.

- ¿Cuál es el mayor desafío del nuevo recinto de Ifema?

-Las instalaciones de los gases medicinales. Lo que es la arquitectura y el resto de las instalaciones, como fontanería y electricidad, lo hizo Ifema, que ha realizado un trabajo espectacular que debería ser escrito con mayúsculas para que la gente se haga una idea. El viernes pasado, a las cinco de la tarde, el pabellón estaba vacío, y el sábado a las nueve de la noche estaban listas la arquitectura y las instalaciones para un hospital de 1.400 camas. O sea, el más grande de España. El problema ahora, ya digo, es la instalación de los gases medicinales: el oxígeno y el aire medicinal. Fundamentalmente, del oxígeno.

- ¿Cuál es la razón?

-Es un problema en todo el mundo y, evidentemente, en toda España. Todos los hospitales de España están ampliando instalaciones de oxígeno. Los enfermos de coronavirus necesitan oxígeno. Pero no hay material en toda Europa y es difícil traerlo de China. Eso es lo que nos está retrasando un poco, y seguramente no acabaremos hasta mañana por la noche (por hoy martes).

- ¿Una búsqueda desesperada?

-Están colaborando empresas que habitualmente son competidoras acérrimas. Se están sumando esfuerzos, capacidades operativas, mano de obra, stocks... para poder llevar esto a cabo.

- ¿Usted nunca había visto esta actitud?

-Nunca. Lo mejor de esta crisis, lo que voy a llevarme puesto, es la gente. Es espectacular. Aquí hay mucha gente trabajando y nadie me pregunta ni cuándo ni cuánto va a cobrar. Simplemente vienen a trabajar. Hablo de personas y de instituciones. Todo el mundo...

- ¿Cuándo estará en marcha ese gran hospital?

-Hay una parte pequeña que ya está en marcha y que, al final del día de hoy (por ayer), tendrá 250 pacientes. Es un pabellón muy provisional para pacientes más leves que no necesitan cuidados intensivos (UCI). Los servicios están casi todos organizados. El almacén de logística es complejo. Los dos pabellones hospitalarios seguramente funcionarán a partir del miércoles o el jueves. Habrá seis UCIs de 16 puestos cada una.

- ¿Cuál es su estado anímico?

-A pesar de que nunca he estado tan cansado como estos días, estoy muy satisfecho de poder hacer algo útil. Ya hace dos o tres semanas que veía que esto era necesario, y no se estaba haciendo, y me retorcía en el sillón de mi despacho y en el sofá de mi casa. Cuando se decidió hacerlo, para mí fue casi un alivio, y poder colaborar es un privilegio. Me siento, sobre todo, feliz de poder ayudar de alguna manera y de ver ese espíritu colectivo de colaboración. En ese pabellón provisional hoy (por ayer) dimos un alta, y toda la gente que estaba trabajando se puso a aplaudir. Lo hicimos porque no podíamos besar al paciente, que era lo que nos apetecía. Lo mismo ha pasado estos días en el Hospital Clínico y en La Paz. Son cosas que te sobrecogen, como ver al personal sanitario cómo está trabajando, con tantas dificultades, y que el 20 por ciento de los infectados son personal sanitario...

- ¿Cuántas horas diarias ha dormido desde el viernes?

-Tres o cuatro.

- ¿Qué nos espera?

-Tengo claro que el mundo va a cambiar después de esto. La Edad Media se acabó con la Revolución Francesa y creo que la era de la globalización se acaba con el coronavirus, y vamos a ver otro mundo distinto, espero que mejor. Ojalá nos quedemos con la parte positiva de todo esto.

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