El Banco de Alimentos repartirá entre mañana y el viernes 30.000 kilos de alimentos entre seis entidades beneficiarias, además de 300 kilos de alimentos en cajas de emergencia. La organización retoma el trabajo habitual para poder hacer pedidos y cajas de emergencia alimentaria para su reparto, Además, está previsto que la semana que viene se repartan más de 40.000 kilos de alimentos entre personas y colectivos desfavorecidos.

Antes de la crisis del coronavirus, más de 18.000 personas ya se estaban beneficiando de la donación de alimentos en nuestra región, pero según la organización, desde que se inició la cuarentena no deja de recibir llamadas, indicativo de que más familias se ven en la necesidad de recibir ayudas alimentarias.

Además, la orden de confinamiento obliga a que de los 55 voluntarios habituales, solo puedan acudir al Banco de Alimentos ocho personas para realizar las tareas de organización de los pedidos para su reparto.

Durante los seis días de cierre al público, el Banco de Alimentos ha trabajado de manera coordinada con la Delegación del Gobierno y varias entidades sociales, con el objeto de crear un protocolo de actuación de reparto de alimentos que cumpliera con toda la normativa de seguridad y protección, establecida en el Real decreto de declaración del Estado de Alarma.

Según María Velasco, directora del Banco de Alimentos “lo primordial es asegurar la salud y seguridad de los beneficiarios y del voluntariado, así como poder cubrir las necesidades y, las emergencias alimentarias que ya están surgiendo”.