El puesto de la Guardia Civil de Trubia permanece cerrado desde la tarde de ayer tras confirmarse que uno de los efectivos que trabaja en el cuartel ha dado positivo en las pruebas de detección del coronavirus. Según fuentes del instituto armado, el servicio permanecerá clausurado hasta que se lleven a cabo las pertinentes labores de desinfección de las instalaciones para evitar cualquier tipo de propagación de la enfermedad. Al cierre de esta edición aún no se sabía cuándo se iba a proceder a realizar dicha actuación.

Aunque los responsables de la comandancia de Oviedo -a la que pertenece el puesto de Trubia- confirmaron ayer la noticia a última hora de la tarde, no ofrecieron información sobre el estado de la persona afectada por el virus, que ya se ha cebado con otros miembros del cuerpo en toda Asturias y también con efectivos de la Policía Local y de varios parques de bomberos de la región. "Esta misma mañana -por ayer- estuve en el cuartel y las cosas estaban como siempre. La verdad es que es una sorpresa para nosotros", explicaba el presidente de la asociación vecinal "Trubia se Mueve" al recibir la noticia. José Luis Álvarez sostiene que la decisión de cerrar el puesto "es la correcta" y que la Guardia Civil "ha actuado con responsabilidad y como se requiere en la situación de alarma que estamos viviendo".

En el puesto de la Guardia Civil de Trubia trabajan habitualmente dos guardias a las órdenes de un sargento, por lo que todos ellos son muy conocidos en la localidad. "Ellos están durante el día, porque por las noches vienen los compañeros de Oviedo a cubrir la zona. Lo importante es que la persona que está afectada se recupere lo antes posible y que no se ponga en peligro a los vecinos", señala Álvarez. La puerta del cuartel de Trubia estuvo cerrada durante la tarde de ayer, pero no había ningún cartel que indicase que no iba a abrir hoy.