Con el fin de asegurar la continuidad y adherencia a los tratamientos y como medida excepcional ante la infección por coronavirus, el Colegio -con y sin receta médica- , productos sanitarios y productos de salud a las personas que no puedan acceder a la farmacia para retirar su medicación, evitando desplazamientos y riesgo de contacto de la población más vulnerable.

De este servicio podrán beneficiarse las personas dependientes, con problemas de movilidad, personas con síntomas de infección de Covid-19 y personas en cuarentena domiciliaria, así como pacientes crónicos complejos con enfermedades respiratorias, diabéticos y con enfermedades cardiovasculares. Siempre se iniciará con la llamada directa al farmacéutico que será el que entre en contacto con los voluntarios de Cruz Roja.

La presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Asturias, Belén González-Villamil, ha manifestado que "se trata de un acuerdo con un marcado carácter social y sanitario que realizamos en un momento de emergencia sanitaria sin precedentes, con el que queremos evitar una mayor transmisión del virus, facilitando el acceso a los medicamentos sin salir de los hogares a las personas más vulnerables en esta crisis.La profesión farmacéutica está plenamente comprometida con la población y estamos haciendo todo lo que está en nuestras manos para combatir la propagación de la infección por coronavirus".

Por su parte José María Lana, presidente de Cruz Roja Asturias indicó "es un placer poder sumar aliados como el colegio de farmacéuticos de Asturias que nos ayuda a dar respuesta a la sociedad en un momento de crisis como este, gracias a esta colaboración y la inestimable implicación de nuestro voluntariado podemos seguir apoyando las personas en situación de extrema vulnerabilidad y de esta manera minimizar el impacto y la propagación del virus". Las primeras entregas de medicación comenzaron el pasado viernes.