Una llamada "Real" para combatir el desánimo y llamar a la unidad contra el coronavirus. Tres pequeños comerciantes de Oviedo vivieron ayer una experiencia "única e inolvidable" en pleno chaparrón por el cierre obligado de sus negocios. El calvario de no ingresar un euro y tener que hacer frente a numerosos gastos sin un horizonte claro quedó aparcado durante 35 minutos para el recuerdo. Los mismísimos reyes de España se pusieron en contacto con ellos a través de videoconferencia para trasladarles un mensaje de optimismo y esperanza con el que los elegidos salieron reforzados.

El encuentro virtual comenzó a las once y media de la mañana. A un lado de la pantalla, Felipe VI y Doña Letizia aparecían juntos sentados en una mesa de Zarzuela y rodeados de papeles para ponerse en situación y tomar nota de las preocupaciones de los pequeños empresarios. Desde sus respectivas casas atendieron la llamada, Ignacio del Río, titular de un establecimiento de moda; Luis Bobes, propietario de una sombrerería de larga tradición; y Paloma de Blas, representante de la última generación de una cadena local de confiteros.

Charla amena

Charla amenaLa charla, definida como "amena y distendida" por los videoconferenciantes ovetenses comenzó con la preocupación de los monarcas por el estado de salud de sus interlocutores y sus familiares. "Nos preguntaron si alguna persona de nuestro entorno se había visto golpeado por el virus", señaló Ignacio del Río, que actualmente presidente el colectivo Comercio de Oviedo, vinculado a la FADE.

A continuación, se preocuparon por las diferentes medidas que están tomando para soportar el "invierno económico" iniciado con el estado de alarma. Los comerciantes explicaron sus respectivas experiencias y adelantaron su intención de lanzar una potente campaña reclamando el apoyo de la sociedad y las instituciones, una vez que se haya superado este periodo de lucha contra la enfermedad. "Les parecieron interesantes nuestras aportaciones", subraya Ignacio del Rio.

Los Reyes transmiten un mensaje de ánimo por videoconferencia a directivos de Comercio de Oviedo

Los Reyes transmiten un mensaje de ánimo por videoconferencia a directivos de Comercio de Oviedo

La más joven de las participantes, Paloma de Blas, reconoció su "orgullo" por haber sido tenida en cuenta en esta conversación a cinco en la que le sorprendió el interés mostrado por Doña Letizia. "Preguntó por el caso concreto del sector alimentario y tomó muchos apuntes", destaca la confitera.

Felipe VI, por su parte, trató de mandar un mensaje positivo dentro de la gravedad de la situación actual. "Con ánimo, unión y entre todos saldremos adelante", aseguran los comerciantes que les trasladó en una conversación cuyo contenido la Casa Real evitó desvelar y que forma parte de una serie de videollamadas realizadas a distintos puntos de España para interesarse por la situación de trabajadores y empresarios. El monarca llamó a que "cada uno ponga su granito de arena" y reafirmó su optimismo en varias ocasiones. "Letizia, sin embargo, hizo más hincapié en las dificultades", puntualiza Paloma de Blas, impresionada con la "cercanía y preocupación" mostrada durante toda la conversación tanto por parte del Rey como de la Reina.

Luis Bobes, por su parte, habla de "una experiencia agradable". Reconoce que le sorprendió una iniciativa que empezó a fraguarse el pasado viernes cuando les avisaron de la posibilidad de esta llamada "siempre y cuando su agenda lo permitiese". Para el pequeño empresario, la videoconferencia fue "una muestra de cercanía y cariño" que agradecen muy profundamente, aunque recuerdan que al comercio local ya lo tienen "en el bolsillo" gracias al impacto económico positivo que cada año tiene para su balance de resultados la celebración de la entrega de los Premios Princesa de Asturias en el teatro Campoamor.

Puertas abiertas

Puertas abiertas

Los empresarios abren "de par en par" las puertas a los monarcas para que visiten la ciudad "cuando quieran" y los animan a repetir el gesto. "Para nosotros es un orgullo y una alegría ver que las instituciones se preocupan por nuestra situación y son conscientes de los problemas que sufrimos", indica Ignacio del Río "todavía impresionado" por la cercanía y la capacidad de los monarcas para ganarse la simpatía de unos autónomos que, hoy por hoy, pasan por uno de los peores momentos, sino el peor, de los últimos años.