Es uno de los pacientes que ha logrado vencer la batalla contra el COVID-19. Juan Bedia, gerente de la Fundación Deporte Avilés (Fundavi) y director general del Círculo Gijón Baloncesto, abandonó el HUCA este miércoles con el alta hospitalaria en su mano tras permanecer durante once días ingresado con una neumonía bilateral muy severa. "Los primeros cuatro días fueron los peores de mi vida, jamás lo había pasado tan mal; fue terrible, respiraba muy mal", recuerda Bedia ya desde su domicilio. Fue a partir del quinto día de ingreso cuando todo cambió y comenzó la mejoría. "Los antivirales y los antibióticos comenzaron a hacer su efecto, desapareció la fiebre y respiraba mejor, me di cuenta de que la pelea estaba ganada", comenta el ovetense. Ahora, confinado en casa seguirá luchando y recuperándose de once largos días que parecían interminables.

Desde su alta, cada día sin excepción, durante al menos los próximos quince, Bedia recibe la pertinente llamada de control para comprobar su evolución, la cual considera que "es favorable". Con ocho kilos de peso perdidos durante su estancia en el centro hospitalario, asegura haber vivido "un mal sueño" mientras se encontraba en un ala de la tercera planta del Hospital Universitario Central de Asturias, habilitado para los enfermos por el COVID-19.

Solo y aislado, no olvida los duros momentos por los que tuvo que pasar. "Se oían comentarios preocupantes, escuchas que ha fallecido gente justo allí a tu lado y mientras tú estás inmerso en una pelea muy dura en la que los primeros días tienes que luchar cuerpo a cuerpo contra el virus, porque los médicos no tienen las herramientas suficientes para ayudarte y se está peleando contra este gran desconocido", relata Bedia sobre la experiencia vivida.

El gerente de Fundavi se apoyó en los mensajes que fue recibiendo a través de su teléfono móvil mientras permanecía aislado en su habitación. Las muestras de apoyo recibidas repercutieron directamente en su recuperación ya que "me hicieron coger fuerzas, es fundamental que la familia y amigos que tengan a gente ingresada les lancen mensajes positivos", destaca. Y es que además de la lucha de por sí ante el COVID-19, la soledad es otro de los pulsos en los que se miden los pacientes. Bedia da buena cuenta de ello y relata que "durante esos días tan duros, todo se vive a flor de piel, uno tiene una gran sensibilidad, de hecho lloré muchísimo", confiesa.

A sus 55 años, el ovetense pisaba por primera vez un hospital ya que "tengo la suerte de que nunca antes había estado ingresado". Tras la desagradable experiencia vivida, el directivo de Fundavi aplaude el impagable trabajo de los servicios médicos ya que detalla que "siempre estaré agradecido a todos los equipos del HUCA: doctores, enfermeras y el personal de limpieza, que están trabajando en unas condiciones muy duras". Fue el pasado lunes cuando se comenzó a barajar la intención de darle el alta. Pero la esperanza se desvaneció por unas horas ya que las pruebas que le fueron realizadas de tórax no eran todo lo positivas que se esperaban, y su salida se retrasó hasta el miércoles. Uno de los días más felices de su vida. Fue uno de los momentos más había esperado durante su ingreso en el HUCA.

Al abandonar el centro hospitalario, Bedia percibió una sensación que nunca antes había tenido. "Pensé de todo al salir, fue una mezcla de sensaciones, una alegría enorme, una emoción tremenda", asegura. Atrás quedaba la lucha contra el COVID-19, que apareció en su vida durante la segunda semana de marzo al "tener fiebre, escalofríos, tos seca, malestar general y agotamiento". Su vivencia espera que sirva para cargar de energía a los pacientes que se encuentran inmersos actualmente en la misma lucha que él ya ha podido dejar atrás y pide que los ciudadanos mantengan su firmeza en el confinamiento. "Hay que tener un cuidado extremo, tenerle un respeto al COVID-19 porque se contagia muy fácil y es muy peligroso, toda precaución es poca", sentencia Bedia. El ovetense celebra que "ni familiares, ni amigos han sido contagiados por fortuna". El ovetense, muy ligado al deporte, es uno de los casos que han logrado vencer lo que ya denomina como "el partido más difícil de mi vida".