La Fundación Mapfre destina 35 millones de euros a frenar el COVID-19, ayudar a las familias y recuperar el empleo. De ellos, 20 millones de euros servirán para adquirir respiradores, material médico y de protección sanitaria que ayuden a combatir la enfermedad en 27 países.

Se han donado además 5 millones de euros al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) para acelerar la investigación de la vacuna que proteja contra al COVID-19. Mapfre dedicará una partida de 10 millones para proporcionar asistencia psicológica, suministrar bienes de primera necesidad, recuperar el empleo y asesorar a los trabajadores autónomos.

La entidad promueve además una campaña de microdonaciones a través de su web y un programa de apoyo a personas mayores mediante voluntarios.