Durante el estado de confinamiento que dio comienzo el pasado 14 de marzo ante la crisis sanitaria provocada por el COVID-19, la Policía Local de Cangas del Narcea ha denunciado a un total de dos personas por encontrase en vía pública sin justificación alguna. El alcalde de Cangas del Narcea, el socialista José Víctor Rodríguez, aseguró que con estos datos se puede ver que "los vecinos de Cangas cumplen responsablemente las normas decretadas por el confinamiento", al tiempo que agradeció el esfuerzo colectivo por quedarse en casa: "Se que se hace duro, pero es la única manera de mantener un número de contagios bajo en el concejo".

Así mismo, los cinco agentes del cuerpo cangués ejecutaron una docena de requerimientos a personas que paseaban a sus perros lejos de su domicilio y que llevaban al animal sin atar. "Wl Real Decreto no lo permite", recordó Rodríguez, quien instó a los propietarios de las mascotas "a ser responsables y no utilizar a los perros como excusa para pasear".

Además, los policías dieron aviso, durante los primeros días, a un total de 26 personas que no podían salir de su domicilio ante el estado de alarma, unos avisos que no conllevaron sanción alguna. En los controles rutinarios que se realizan desde la Policía Local de Cangas del Narcea, los agentes identificaron a dos personas que acudían a trabajar sin el correspondiente permiso y realizaron una inspección a un local que se encontraba vendiendo plantas, algo no permitido durante el estado de alarma.

Los agentes realizaron el control a cuatro vehículos, todos ellos con justificación para circular al dirigirse al trabajo o al supermercado. Así mismo, se realizó el requerimiento a un total de 31 personas, que caminaban por la vía pública con justificación, al dirigirse al trabajo, a la compra, al médico, a por medicinas o a cuidar a un familiar mayor. Todos los días, tanto por la mañana como por la tarde, desde la Policía Local se controla las llegadas y salidas de autobuses, cuyos pasajeros, que viajan en su totalidad con motivo de trabajo, son identificados.

Los agentes del cuerpo cangués continuarán animando las calles de la villa con las sirenas del vehículo a las 20 horas, tras la patrulla rutinaria que realizan por la tarde. Lo harán en un solo vehículo, sin ponerse de acuerdo con el resto de fuerzas y cuerpos de seguridad del estado, para evitar que se formen caravanas o desfiles, y de este modo no incumplir la legislación vigente. Los agentes dejarán de felicitar los cumpleaños por los domicilios, al considerarse que puede tratarse de una fiesta o celebración, no permitida en el Real Decreto.