Los matemáticos Juan Luis Fernández, catedrático de la Universidad de Oviedo y director del Grupo de Problemas Inversos, Optimización y Aprendizaje Automático, y la profesora Zulima Fernández-Muñiz, de la misma institución, modelizan desde el principio de la pandemia la evolución de la enfermedad en España, las diferentes autonomías y varios países del mundo. Sus predicciones han sido acertadas (pronosticaron cuándo se produciría el pico nacional de nuevos casos y en diversos escenarios). Además, con un sistema similar al que se emplea en Bolsa para predecir el valor futuro de las acciones, establecen la cifra más probable de nuevos casos, ocupación de servicios sanitarios y fallecimientos que se producirán al día siguiente. Su modelo ha sido consultado por los servicios de salud de Asturias, Cantabria y Castilla y León, además de por autoridades de países como EE UU, Pakistán o Venezuela. Para el conjunto de España, constatan la tendencia descendente en la curva, con lo que en unas dos semanas el número de nuevos contagios diarios podría situarse en el entorno de los 250, una cifra similar a la que existía en el primer tercio de marzo. No obstante, la ampliación del número de test realizados podría incrementar los casos declarados, aunque no serían nuevos contagios, sino el diagnóstico de los no contabilizados al tratarse de pacientes leves en sus domicilios. Los matemáticos advierten de la poca homogeneidad y fiabilidad de los datos en algunos aspectos: "Ese hecho puede distorsionar los pronósticos, que deben basarse en datos claros para así ayudar a predecir el impacto sanitario".
