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Crisis del coronavirus

Los geriátricos seguirán blindados aunque el Gobierno suavice el confinamiento

Asturias es la quinta comunidad con mayor tasa de fallecimientos en las residencias de mayores, que ya superan el centenar de víctimas mortales

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Labores de desinfección en el Sanatorio Covadonga, en Gijón

Los geriátricos asturianos continuarán blindados a cal y canto. Sobre la mesa del Ejecutivo regional ni siquiera está como propuesta a medio plazo, aunque se esté dibujando la estrategia para ir flexibilizando el confinamiento para el conjunto de la sociedad. Otra cosa es que en próximos días se permita el acompañamiento a personas que estén al final de su vida, para evitar el fallecimiento en soledad. Será con unas condiciones que se están acabando de determinar. Las residencias del Principado, públicas y privadas, superaron ayer el centenar de víctimas mortales, con cuatro nuevos decesos. Al mismo tiempo, se eleva a 144 el número de residentes recuperados.

Con datos acumulados hasta el 14 de abril, las residencias geriátricas asturianas ocupaban el quinto puesto en fallecimientos en la comparativa nacional sobre el total oficial, con un 59,6 por ciento al sumar los casos confirmados y aquellos con sintomatología compatible. Si solo se atendía a los casos confirmados, el Principado ocupaba el mismo puesto en el ranking estatal pero por la cola.

Las cifras de fallecimientos y de contagios siguen aumentando, aunque en mucha menor medida, y se reducen los casos activos. Según los datos facilitados ayer por la Consejería de Salud, cuatro nuevos fallecimientos -todos ellos en centros hospitalarios- elevan a 103 el total de víctimas mortales por coronavirus en las residencias asturianas. Sale de la estadística un anciano de la residencia Santirso el Bosque, tras confirmarse que su muerte no se debió al coronavirus.

La buena noticia dentro de la gravedad es que también hay 170 recuperados desde que empezó la pandemia. De ellos, 144 son residentes y 26 profesionales. El total de residentes infectados asciende a 545, mientras que los activos suman 298. En el caso de los profesionales, hay 183 infectados desde que se inició la pandemia y 157 activos.

Las residencias públicas, privadas y concertadas afectadas suman 47, aunque son 32 los centros con casos activos. Así que siendo los geriátricos el mayor foco de contagios y concentrando más de la mitad de los fallecimientos en la región, el Ejecutivo regional no se plantea "ni remotamente" abrir las puertas de estos centros.

De hecho, el Principado va a mantener la política de separar a sus residentes en función de si no están contagiados, si lo están pero son asintomáticos, los leves y los que necesitan atención hospitalaria. Ayer mismo, seis residentes de un geriátrico de Siero y ocho de otro de Viella fueron trasladados al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) ante la imposibilidad de sus centros de origen de habilitar espacios de aislamiento, según confirmaron las fuentes consultadas. También matizaron que otro de los objetivos es "cortar el brote" en ambas residencias.

Otra cosa es el acompañamiento familiar al final de la vida en un geriátrico. Ocho de cada diez mayores fallecen en un centro hospitalario, pero hay un 20 por ciento que lo hacen en una residencia. De ahí que la Consejería de Derechos Sociales y Bienestar, en colaboración con Salud, esté elaborando un protocolo para evitar el fallecimiento en soledad.

"Somos plenamente conscientes del doble sufrimiento que se vive cuando llega el final de una vida y sobre todo cuando llega en soledad, por un lado para la persona que se va y por otro para sus familiares más cercanos. Vivimos una situación muy compleja en la que prioritariamente tenemos que garantizar la seguridad de las personas que viven en los centros residenciales, pero no renunciamos a que quienes tristemente llegan al final de sus vidas lo hagan sintiendo cerca a sus seres queridos", explicó la consejera de Derechos Sociales, Melania Álvarez.

"Aunque sabemos que en torno al 80 por ciento de mayores que han fallecido a consecuencia de esta crisis lo han hecho en un hospital, esta Consejería piensa en las personas que hay detrás de cada decisión que toma y por eso trabajamos en una respuesta que haga posible que ningún residente de nuestros centros tenga que enfrentar el final de sus días en soledad", añadió.

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