"La apertura que proponen es inviable, no salen las cuentas. Habrá muchísima gente que no abra". Pedro Caramés es el presidente de la asociación de hosteleros Bulevar de la Sidra, de Gascona (Oviedo) y ayer estaba entre sorprendido e indignado con la propuesta del Gobierno de abrir sólo con un tercio de las terrazas, y sin barra. "En cualquier negocio de hostelería en Asturias esto no tiene sentido, pero en el caso de las sidrerías, es un disparate", aseguró.
El malestar en el sector es de tal calibre que aseguran que "para eso vale más que nos digan que no abramos hasta julio, ya con todas las garantías de seguridad y conociendo las medidas que tenemos que adoptar", aseguró Caramés.
A la inviabilidad de la apertura "con tres mesas en una terraza" se suma la falta de datos "que permita saber dónde nos movemos", añadió. "Seguimos sin saber si se van a ampliar los expedientes de regulación temporal de empleo cuando acabe el estado de alarma, si va a ser flexible, si vamos a recibir ayudas para afrontar el abono de las rentas... Por no saber, no sabemos ni las condiciones de seguridad e higiene tenemos que adoptar, porque nadie informa de nada", aseguró Caramés.
El presidente de los hosteleros de Gascona remarcó que "todo lo que lanzan son globos sonda, sin concretar y luego van anunciando medidas paralelas con lo que nadie se fía porque no sabemos si lo que vale hoy seguirá valiendo mañana, o en el mismo día por la noche. Igual es mejor esperar a julio y no arriesgar ni el negocio ni el empleo de los trabajadores, que por cierto, muchos todavía no han cobrado lo de marzo".
