Uno de cada tres negocios de hostelería se ven abocados al cierre si no pueden recuperar la normalidad en junio. Ese es uno de los datos que aporta una encuesta realizada por la patronal de la hostelería y el turismo de Asturias, Otea. También indica que el 90 por ciento de los trabajadores a los que se les ha aplicado un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) no han cobrado todavía el paro. El 63 por ciento de los autónomos del sector ya recibieron la prestación solicitada.
La situación del sector turístico asturiano es muy difícil, y la desescalada anunciada por el Gobierno no satisface sus expectativas. Al punto que muchos aseguran que no pueden abrir solo con un 30 por ciento de su aforo, e incluso con un 50 por ciento, porque no cubrirían gastos y algunos podrían incrementar las pérdidas.
El 97 por ciento de los negocios están cerrados desde el 14 de marzo. Otro 1,54 por ciento son alojamientos para trabajadores de servicios esenciales, y un 1,3 por ciento han realizado servicios a domicilio de comidas.
La encuesta realizada por Otea revela que las posibilidades de futuro varían de unos a otros en función de cuánto se pueda tardar en recuperar la nueva normalidad. Solo el 3,87 por ciento de los empresarios aseguran que no tendría mayor problema por mucho que se alargue la situación. Y el 28 por ciento indica que "por la naturaleza del negocio" sí puede tener dificultades pero sin llegar al peligro de cierre.
El 10,57 por ciento aseguran que "la situación sería insostenible dentro de un mes" (cuando se hizo la encuesta ya hace unos días), mientras que la tasa se dispara hasta el 35,8% entre los que aseguran que "a partir de tres meses tendrían riesgo de tener que cerrar". Casi un 2 por ciento de los empresarios del sector asegura que ya no van a poder abrir sus negocios, y un 15 por ciento añade que aún no lo sabe.
Entre las aportaciones de los empresarios figuran los de zonas turísticas como la del Oriente, que explican que muchos negocios "empezábamos a trabajar el 1 de abril y nos vemos sin ayudas para nuestros trabajadores fijos discontinuos. Si no se nos permite abrir en verano, daremos el año por perdido hasta Semana Santa de 2021".
La encuesta realizada por la patronal del sector turístico asturiano también contempla la cancelación o suspensión de eventos que ya estaban contratados. Se refiere en concreto a bodas, banquetes, comuniones y comidas de grupo. El 80 por ciento de todas estas celebraciones se han visto afectadas.
Algo más del 21 por ciento de estos eventos se han pospuesto para el año que viene y otros tantos se han anulado sin nueva fecha. Para el cuarto trimestre de este año (octubre a diciembre) se han trasladado el 26,56 por ciento de las celebraciones. Y como siempre hay optimistas, un 18,75 por ciento mantiene la esperanza de poder celebrar su particular festejo durante el verano, a lo largo del tercer trimestre.
Aproximadamente el 64 por ciento de los negocios consultados han conseguido alguna medida de alivio para el abono del alquiler del inmueble que ocupa. Aunque existen diferencias. El 24,5 por ciento de los empresarios del sector asegura que el propietario del local les ha exonerado del pago durante el periodo de alarma, mientras que el 19,4% ha conseguido un aplazamiento del abono del alquiler.
Otro 16,2 por ciento de los hosteleros y restauradores han llegado a un acuerdo para rebajar el importe durante este periodo del estado de alarma y un 4,6% tienen además de una reducción de la cuantía, un aplazamiento para pagar. El 35,2 por ciento asegura que no han conseguido ningún tipo de ventaja en el abono del alquiler en el que desarrolla su negocio.
