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CARMEN ALONSO MARQUÉS | Grado

"Es una explosión de emociones, donde el amor es proporcional al miedo"

Carmen Alonso con Lorenzo y León Sánchez Alonso. S. Arias

Carmen Alonso, de Grado, se estrenó ayer por primera vez en la celebración del Día de la Madre a sus 33 años. Lorenzo y León son los gemelos que trajo al mundo el pasado mes de noviembre junto a su pareja, el también moscón Álvaro Sánchez. Dos niños que han llenado de amor y alegría su casa y con los que están pasando este confinamiento entre porteos, baños y la hora de la comida. "Ser madre es una explosión de emociones, donde el amor es directamente proporcional al miedo", afirma.

Ella está de excedencia tras haber culminado la baja maternal y él trabaja desde casa desde hace años, por lo que ambos están dedicados a los pequeños durante el confinamiento. "Es importante tener una rutina y organizarse, yo estoy con ellos por las mañanas mientras Álvaro teletrabaja y, luego, cambiamos", explica la joven.

Lorenzo y León nacieron el 22 de noviembre, en la 36.ª semana de gestación. Fueron prematuros, como casi todos los partos gemelares y, por ello, pasaron unos días en la unidad de neonatos. En cuanto se los llevaron a casa, comenzó la rutina: "Estábamos los dos solos y a Álvaro, al tener teletrabajo, le era difícil conciliar, así que contratamos a una señora que, claro, duró un mes porque surgió lo del confinamiento".

Así es que están pasando la cuarentena los cuatro solos "porque hasta ese momento los abuelos venían, que siempre les presta la hora del baño y al estar ellos estás más tranquila, pero ahora somos los dos en exclusiva para ellos". Por suerte, se ha acogido a una excedencia de su puesto de trabajo, como subdirectora de hotel, lo que le permite pasar más tiempo con los niños. Sin embargo, su pareja ha reducido la productividad. "Es una de las consecuencias", lamenta.

Los días de confinamiento van al ritmo de los pequeños. Preparar comidas, baños y, además, atender la casa. "Porteamos a los niños para barrer o cocinar y lo bueno es que ruidos como el grifo o la batidora les calman, es como si estuvieran en una sesión de spa", comenta. Una aventura como padres primerizos, y de gemelos, que Sánchez cuenta en el podcast que ha impulsado, "Padre de Gemelos".

Han aprendido mucho en los últimos meses y con muchas ganas de seguir descubriendo la experiencia. Y, pese a los miedos, el temor a que les pase algo o que no estén bien, el amor que les dan lo compensa todo. Y ayer lo celebraron en el Día de la Madre.

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