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Avilés quita canas y malas hierbas

Antonio García regresa a su huerta en La Luz l Marta Fernández tiñe a Maribel Carmona en el día en que ambas pisaban la calle por vez primera

Jorge Centeno, en su taller de chapistería.

"Perdimos la época para plantar cebollín. Ahora nos queda mucha faena en el huerto para limpiar la hierba que creció. pronto plantaré escarolas, pimientos del padrón y ajos". Habla el avilesino Antonio García, que ha vuelto al huerto urbano de La Luz tras el confinamiento. Tiene muchas ganas de sembrar "en un espacio donde no hay problema para mantener la distancia de seguridad". Quien también volvió al trabajo fue la peluquera Marta Fernández, que en su primer día en la calle después del 14 de marzo atendió a Maribel Carmona, que también se estrenaba tras la desescalada. "También es mi primer día fuera de casa", apuntó la cliente, que siendo previsora pidió cita previa el pasado viernes. "Vine con miedo porque tengo varias alergias, los clientes son muy respetuosos", señala Fernández. Carmona es una mujer presumida y prefirió refugiarse en casa antes que salir a la calle. Es más, una de las primeras tareas fue ir a la peluquería. Ambas estaban protegidas por una mascarilla y charlaban mientras Fernández daba una mano de tinte.

Andrés Crespo regenta una tienda de deportes. Abrió por primera vez ayer y con la lección aprendida: "Tenemos que limpiar y desinfectar dos veces al día el local, trabajamos con cita previa e intentamos evitar un desastre mayor que con el cierre".

Una de sus clientes, Isabel Menéndez, compró calzado y prefirió gastarse el dinero en la tienda de Crespo antes que pedir un envío a domicilio a través de internet. "A la hora de hacer compras es mejor apoyar al comercio local, tenemos que concienciarnos entre todos", remarcó Menéndez.

Los talleres de chapa y pintura de vehículos como Carrocerías Centeno no frenaron su actividad, puesto que ya se consideraban un sector esencial durante el confinamiento. Eso sí, han trabajado con servicios mínimos. Según su responsable, Jorge Centeno, desde que comenzó el estado de emergencia sanitaria, el taller ha reparado coches de trabajadores de Policía, Bomberos, empleados de Asturiana de Zinc, todos ellos personal de servicios o empresas que no han parado su actividad.

"Por supuesto que tenemos pérdidas, como todos, se limita la clientela y además atendemos con cita previa, también", apuntó Jorge Centeno.

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