La desescalada por el coronavirus está llenando los parques españoles de “nuevos runners”. Muchos ciudadanos apuestan por bajar los kilos ganados en cuarentena saliendo a correr. Y, por la inexperiencia, llegan las agujetas y las sobrecargas. Por eso, publicaciones especializadas como “Men´s Healt” se hacen eso del último sencillo entrenamiento de moda para perder peso y además evitar lesiones. Es muy fácil de efectuar y apto para novatos. El método, que recibe el nombre de “Caco” simplemente se basa en alternar las caminatas con las correr. No correr de golpe, pues.

Así se evita dañar músculos, articulaciones o tendones y se puede reafirmar la musculatura. Además, los expertos recomiendan caminar más que correr. Es decir, si sales una hora, que te pases al menos treinta minutos caminando. Por otro lado, los expertos ponen el foco en cuidar los estiramientos y las precauciones, especialmente en los “runners novatos”. Las recomendaciones básicas, entre otras cosas, se basan en empezar caminando, usar un buen calzado y llevar ropa blanca o de colores blancos. Estas son las recomendaciones del doctor Moreno. Y, contra las agujetas, hay varias fórmulas, pocas milagrosas. Y la mejor es es no irse de madre. "El mejor tratamiento es la prevención: estirar bien y hacer ejercicio en progresión muy lenta. No podemos iniciar fuerte el ejercicio, si no que debemos llevar un ritmo adecuado a nuestras posibilidades", explica Miguel del Valle (Villaviciosa, 1955), especialista en Medicina del Deporte y Catedrático de la Universidad de Oviedo.

"Además de las agujetas, también pueden aparecer ampollas, al no estar acostumbrados a zapatillas y calzado deportivo tras tanto tiempo encerrado. Lo mejor contra las agujetas, una vez que surgen, es una buena rehidratación. Mucha gente también utiliza antiinflamatorios o analgésicos. Lo mejor es desintoxicar el cuerpo con una buena rehidratación", explica Del Valle, que recalca que tras el entrenamiento es preciso aplicar un "enfriamiento". El experto se refiere a que no es recomendable parar de golpe, si no que se debe optar por unos estiramientos al finalizar (además de los iniciales). Una vez en frío, la crioterapia (usar el frío) también es recomendable”.

Por otro lado, una conocida fruta también puede ser una buena opción: la piña. Los estudios realizados dicen que sus carbohidratos ayudan a recuperar rápidamente tras un esfuerzo, por tanto se recomienda consumirla justo después del ejercicio. La clave es el glucógeno que se recupera, que se ha gastado previamente en el esfuerzo físico. Por otro lado, la piña contiene bromelina, que es una encina que ayuda a reparar las fibras musculares dañadas y que provocan las agujetas. Las agujetas, a modo de explicación rápida, son microrroturas que aparecen en el cuerpo por la acumulación del ácido láctico y se van en unas 48 horas.