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Orlando Pelayo y Miró listos para la vuelta del Bellas Artes

La gran pinacoteca regional hace acopio de material sanitario y limita el aforo en cada una de sus salas cara a su reapertura tras el confinamiento

José Carlos González Zazo, ayer, en la entrada de la ampliación del Bellas Artes. IRMA COLLÍN

Las puertas del Museo de Bellas Artes de Asturias se cerraron el pasado 13 de marzo, en plena escalada de contagios por coronavirus, pero la plantilla de la gran pinacoteca asturiana no ha parado. En estas semanas de confinamiento, el museo ha volcado su actividad en su página web y en las redes sociales, donde ha colgado a diario materiales para que cualquiera que lo desee pueda profundizar en el conocimiento de sus colecciones. Pero además, el museo viene realizando desde hace semanas un trabajo crucial: la preparación de sus espacios y protocolos para el "día después", para el día en que pueda reabrir sus puertas.

Aunque la fecha en la que los usuarios puedan retornar físicamente al museo no está aún concretada -"Proyectamos abrir cuando la Consejería de Cultura dé la instrucción", insiste el director, Alfonso Palacio-, los preparativos ya están muy avanzados. En primer lugar, el museo reorganizó las exposiciones, publicaciones y actividades programadas para estos meses, incluyendo la muestra monográfica sobre Orlando Pelayo y la de dos obras de Joan Miró, pertenecientes a la Fundación Abanca, que se podrán ver en el museo dentro del programa "La obra invitada". Estas dos exposiciones se inaugurarán en cuanto el Bellas Artes recupere la velocidad de crucero.

En paralelo, el museo comenzó a trabajar, ya en las primeras semanas de confinamiento, ante las previsibles restricciones que tendría que asumir, para lo cual Alfonso Palacio y José Carlos González Zazo, Jefe de Instalaciones y Mantenimiento del museo, prepararon un plan de actuación y adaptación de la pinacoteca ante la pandemia.

Material

Para empezar, el museo se hizo con una ingente cantidad de material sanitario con el que proteger a empleados y usuarios durante varios meses. Así, se adquirieron 11.000 mascarillas, 46.800 unidades de guantes de poliuretano, gran cantidad de geles hidroalcohólicos, caretas de protección y termómetros sin contacto. También se renovó parte del material de oficina, caso de las papeleras, que pasaron a ser de pedal, y se adquirieron marcadores de suelo y catenarias para regular el acceso por las dos entradas del museo.

Mascarillas y guantes estarán a disposición de todos los empleados del museo, pero también hay mascarillas desechables de un solo uso para aquellas personas que acudan a visitas guiadas, a conferencias o a las actividades organizadas por el museo, especialmente en aquellas dirigidas a un público infantil o familiar.

"Han llegado ya, más o menos, las tres cuartas partes del material que hemos encargado, y el resto llegará entre la próxima semana y los primeros días de la siguiente", precisa Palacio. Lo más relevante de entre lo que aún no ha recibido el museo son unas mamparas para separar los mostradores de ambas entradas que se instalarán entre el jueves y el viernes de la próxima semana. "Las encargamos hace ya algún tiempo, pero los instaladores están desbordados, no dan abasto", explica Palacio.

Aforos

Otros aspecto fundamental cara a la reapertura es la limitación de aforo. El museo prevé reducir su aforo máximo a un tercio del total, lo que implicaría que en su interior no podría haber, en ningún momento, más de 200 personas. Pero además, se aplicarán limitaciones de aforo por plantas y por salas.

Palacio y González Zazo han analizado cada uno de los 34 espacios del museo (27 salas, dos recepciones, la sala del café y cuatro corredores) para ajustar en cada una los aforos. Justo ayer, e equipo del museo colocaba en cada planta y cada sala los carteles informando a los futuros visitantes del aforo máximo de cada espacio.

Información

La tercera pata del plan de reactivación del museo pasa por reforzar la información, tanto para los empleados como para los visitantes. Para ello, se han instalado en diferentes puntos del museo croquis con las medidas de distancia y seguridad recomendadas para evitar la transmisión del virus.

Además, el museo está preparando unos folletos explicativos que se entregarán a los visitantes con esas mismas medidas, y también uno más amplio para entregar a toda la plantilla, explicando las directrices para minimizar riesgos durante la jornada laboral. También se prevé hacer una sesión informativa con todos los trabajadores, divididos por áreas, antes de proceder a la apertura.

Estos folletos aún no están ultimados, ya que Palacio y González Zazo están esperando a las directrices finales del Gobierno central, por si hay algún modificación respecto a lo que ya se conoce. "Estaremos muy atentos a lo que se publique en el Boletín Oficial del Estado (BOE) de este domingo por si tenemos que incorporar alguna medida adicional", precisa Alfonso Palacio. El objetivo, insiste, es estar preparados para, una vez que el Principado autorice la apertura de los centros culturales, poder reencontrarse con los asturianos.

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