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El televidente: Cría fama y échate a dormir

Telecinco vuelve a su esencia tras aprovechar el escándalo de Merlos - y la vuelta de José Antonio Avilés

Lara Álvarez y José Antonio Avilés en "Supervivientes".

"El placer de derribar ídolos es directamente proporcional a la necesidad de tenerlos", estas palabras del escritor uruguayo Eduardo Galeano, que resumían el trato que la prensa daba a Maradona, bien podrían presidir la entrada a las instalaciones de Telecinco. Serviría como una especie de aviso a navegantes. Un mensaje de advertencia, como el que aparece en las cajetillas de tabaco, para alertar de los peligros que entraña cruzar ese ansiado umbral hacia la fama. Y sino, que se lo pregunten a Marta López o a José Antonio Avilés.

La primera consiguió ella sola, con la colaboración accidental de su hasta entonces pareja ( Alfonso Merlos) y su supuesta amante, levantar las audiencias de la cadena en un momento en el que la decisión de acortar los espacios dedicados al coronavirus ya estaba sobre la mesa. El vídeo viral del tertuliano acompañado en su casa por otra mujer que no era la exconcursante de "Gran Hermano" abrió la caja de los truenos y convenció a la cadena de que era el momento de volver a apostar por sus temas estrella aferrándose al "Merlos place". Semanas intensas de guardias a las puertas de la casa del tertuliano y polígrafos en el "Deluxe" que terminaron en cuanto el periodista y su acompañante amenazaron con demandar a la cadena.

A partir de ese momento, y contrato jugoso mediante, el foco apuntó de repente hacia Marta López. Su vida, sus negocios y sus supuestas relaciones con hombres poderosos y casados le hicieron pasar de víctima a verdugo en dos tardes. Historias y rumores que pasaron a llenar la escaleta de Telecinco en un giro de guión que no veíamos desde "Juego de Tronos".

El otro caso paradigmático de esa necesidad de Telecinco de sacarse nuevos personajes de la manga para después poder "atizarles" es el de José Antonio Avilés. El ya conocido como "El pequeño Nicolás de la televisión" estuvo meses ejerciendo de periodista en "Viva la vida" sin problemas y culminó su camino a la fama al convertirse en concursante de "Supervivientes". Durante su concurso, el cordobés cumplió a la perfección con su papel de agitador pero con su expulsión se hizo patente la necesidad de ahondar en la personalidad de la nueva estrella de Telecinco para estirar el chicle.

La cadena, que no dudó en sacar la artillería pesada, empezó a desenmascarar al colaborador desvelando que en realidad no tenía el título de periodismo. Siguió por su tendencia a exagerar aspectos de su vida y la cosa terminó en una retahíla de testimonios denunciando supuestas estafas. Palabras mayores. Ahora solo falta la que arranque la lucrativa tourné de respuesta. Cría fama y échate a dormir.

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