Juan Genovés estuvo en Avilés en junio del año pasadoestuvo en Avilés en junio del año pasado y fue fiel a su fama de hombre sin pelos en la lengua: "Estoy harto de chapuzas, el montaje del Niemeyer es perfecto", aseguró con contundencia el artista valenciano en la presentación de la exposición "La unidad divida por cero", que acogió la cúpula del complejo cultural de la ría de Avilés durante seis meses y que recogió obras del propio Genovés, pero también de sus tres hijos: Pablo, Silvia y Ana Genovés. "Siempre había visto la obra de mis hijos de manera independiente, porque ellos han hecho lo que les ha dado la gana. Aquí, sin embargo, las suyas y la mía forman un crisol. Como si fuéramos acero", explicó el autor de "El abrazo", un símbolo de la Transición, un cuadro que vive en el Congreso de los Diputados, aunque estos días está el Reina Sofía.

La visita de Genovés a Avilés también sirvió para inaugurar la escultura "Transbase", erigida a un paso de la puerta principal del auditorio del complejo cultural. Esta iniciativa cultural, huella perenne de la creatividad de Genovés y ahora convertida en la última obra al aire libre que creó el valenciano, fue posible gracias a la colaboración preferente de LA NUEVA ESPAÑA, el Grupo Daniel Alonso y la empresa Ariexca. A esas empresas se sumó una campaña de micromecenazgo con una doble finalidad: costear los gastos de instalación de la pieza y hacer sostenible económicamente la exposición.

Juan Genovés inspeccionó con exhaustividad la escultura surgida de su ingenio y fabricada en un taller del Grupo Daniel Alonso. Delante de la "L" invertida carcomida por personas salidas de su serie "Multitudes" -una pieza "etérea, pero de casi cinco toneladas", Genovés se encontró con Manuel Vila, el representante del Grupo Daniel Alonso en el patronato de la Fundación del Niemeyer. "Es maravillosa, es perfecta", le dijo aquel día Genovés. Vila cogió el testigo: "Cuando Daniel Alonso y Juan Genovés unen sus conocimientos salen cosas como ésta", destacó. La alcaldesa de la ciudad, Mariví Monteserín, profundizó en la idea: "La pieza es muy significativa de lo que es la ciudad: una suma de industria y de cultura".