La Policía Nacional detuvo a primera hora de la mañana de ayer a dos vecinos de Madrid acusados de amenazar a una ovetense que había denunciado al hijo de los ahora arrestados por un episodio de violencia de género. El arresto tuvo lugar en las inmediaciones de la Jefatura Superior de Policía de Asturias, en el centro de Oviedo. En el momento de los hechos los ahora investigados se encontraban en el interior de un vehículo Audi, en el que habían viajado desde la capital de España saltándose además las medidas de confinamiento impuestas para frenar la expansión del coronavirus y que impiden el desplazamiento entre provincias. Pretendían forzar a la ovetense a que retirase la denuncia por malos tratos.
Al parecer, todo empezó en la noche del pasado martes. Fue entonces cuando la víctima llamó a la Policía para denunciar la agresión de la que había sido víctima. Los agentes procedieron al arresto del supuesto maltratador, al que investigan por la comisión de un delito de violencia de género. El hombre fue directamente enviado al Hospital Universitario Central de Asturias, en donde quedó ingresado para que le realizaran las pruebas del coronavirus. Fuentes cercanas a la investigación del caso aseguraron ayer a este periódico que el hombre ya había dado positivo y que en el momento del suceso se encontraba en cuarentena en su casa pasando la infección. El protocolo obligó a repetirle ahora la prueba y a dictaminar su ingreso hospitalario como medida de precaución.
En cuanto tuvieron conocimiento de lo que había sucedido, los padres del denunciado cogieron el coche en Madrid y viajaron hasta Oviedo. Una vez en la capital de Asturias se dirigieron al domicilio de la víctima y la sacaron de casa "a patadas", según varios testigos de los hechos. Una violenta escena que habrían presenciado también los hijos de la mujer maltratada, dos menores de edad. El arresto tuvo lugar cuando los ahora investigados -que previsiblemente pasarán hoy a disposición del juzgado de guardia-, se encontraban acercándose a dependencias policiales con el objetivo de que su víctima retirase la denuncia.
Las fuerzas de seguridad llevan meses alertando del aumento de los casos de violencia de género como consecuencia del confinamiento. En este sentido, desde todas las instituciones públicas se llama a alertar a las autoridades en el caso de que se detecten comportamientos violentos o algún tipo de agresión física o verbal. Además, se han habilitado números de whatsapp para que las víctimas puedan pedir auxilio desde su móvil. Unos servicios que son compatibles con el teléfono 016 de ayuda a las víctimas. Este número no deja huella en la factura telefónica, pero es conveniente borrarlo del registro de llamadas.
