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Ribadeo echa en falta al cliente astur

"Si quieren que subsistan nuestras tiendas y nuestra hostelería tienen que abrir las fronteras", piden los comerciantes del municipio gallego

El presidente del comercio de Ribadeo, el figuerense Francisco Iriarte, ayer, en la orilla gallega del puente de los Santos, con Asturias al fondo. T. CASCUDO

El empresario Francisco Iriarte representa muy bien la insólita situación que se vive estos días en la frontera asturgalaica con la prohibición, por motivo del estado de alarma, de cambiar de provincia. Es natural de Figueras (Castropol), pero reside en Ribadeo (Lugo), donde regenta una imprenta (tiene otra en Vegadeo) y preside la Asociación de Comerciantes, Industriales, Servicios y Autónomos (Acisa) del municipio ribadense. Además de los trastornos que le produce en su día a día el bloqueo de fronteras, lamenta el daño que puede hacer al comercio de la villa lucense, el más pujante de la comarca del Eo y para el que el cliente asturiano es vital.

"El sesenta por ciento de nuestra clientela es de Asturias", incide, al tiempo que añade que es un asunto que han planteado en todas las reuniones mantenidas estos días con responsables de la Xunta. "Si quieren que subsista el comercio y la hostelería de Ribadeo tienen que abrir las fronteras", añade. En este sentido, confía en que el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, traslade la propuesta en la próxima conferencia entre los presidentes de comunidades autónomas y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

"Es una tomadura de pelo que en el País Vasco, con peores números que los nuestros, puedan moverse por toda la comunidad y que aquí no permitan el movimiento en la frontera con una situación sanitaria, tanto en Asturias como en Lugo, inmejorable", añade Iriarte. Reconoce que algunos vecinos del lado asturiano siguen pasando a comprar a Ribadeo, pese a exponerse a una sanción por saltarse la norma. "Hay gente de Figueras que pasa al Eroski o al Mercadona a comprar y en ocasiones se permite, pero como el asunto no está claro, la gente tiene miedo y busca otras opciones", admite.

El Ayuntamiento de Ribadeo remitió este martes una carta a la subdelegada del Gobierno en Lugo, María Isabel Rodríguez, para hacer más presión con este asunto. El alcalde ribadense, Fernando Suárez (BNG), pone de manifiesto que el cierre fronterizo "supone una traba insostenible para la reactivación" de la economía de Ribadeo. "El cierre de nuestra frontera administrativa con el Occidente de Asturias impide que una parte muy importante de la población consumidora de nuestra villa tenga acceso al municipio", añade el regidor.

Suárez deja claro que Ribadeo es una villa que vive fundamentalmente del sector servicios y destaca el "significativo" número tanto de asturianos como de vecinos de otros núcleos de la mariña lucense "que se desplazaban a diario hasta nuestro municipio con el fin de comprar o tomar algo en los negocios locales, siendo este el principal motor del desarrollo local ribadense".

La propuesta concreta que plantea Ribadeo es que se permita "el acceso al municipio a la población del occidente asturiano que acuda a hacer uso del comercio local como medida necesaria para la reactivación económica del concejo". Hace hincapié en que ni la provincia de Lugo ni Asturias fueron territorios afectados gravemente por el covid-19 y que ambos se encuentran en la misma fase de la desescalada. El regidor nacionalista concluye su carta diciendo que sus argumentos están expuestos "con la cabeza y con el corazón" y "con el compromiso a partes iguales de protección contra la pandemia que sufrimos y de reactivación ponderada de nuestra economía local y comarcal".

La misiva de Ribadeo se suma a la enviada semanas atrás por la asociación de municipios de la Reserva del Río Eo, Oscos y Terras de Burón (InterEo), un colectivo al que también pertenece Ribadeo. En esta carta asturianos y gallegos del Eo reclamaban la apertura de transitar por esta zona fronteriza. "No entendemos de distanciamientos ni espacios fronterizos en el día a día. Si nos quitáis la movilidad entre los concejos limítrofes es como quitarnos dos patas de la silla. Nos quitáis el cincuenta por ciento de nuestros recursos", exponían entonces los catorce regidores afectados (siete asturianos y otros tantos gallegos). Aquella carta no obtuvo respuesta alguna ni de la Delegación del Gobierno en Asturias ni de la Subdelegación de Lugo.

No es solo el comercio ribadense el que sale perjudicado con el cierre de fronteras, sino que también los comerciantes de Vegadeo reclaman la importancia de la clientela que procede del lado gallego del Eo. Municipios lucenses como Trabada, A Pontenova o núcleos del interior de Ribadeo tienen en Vegadeo su comercio de referencia y también se ven afectados por este cierre insólito. No obstante, en el lado asturiano también hay quien opina lo contrario y sostiene que la imposibilidad de ir a Ribadeo ha hecho revivir en las últimas semanas a las pequeñas tiendas de comestibles del lado asturiano del estuario.

Dejando al margen estas pequeñas rivalidades, es mayoritario el sentir de quienes quieren recuperar la normalidad en un territorio que convive con naturalidad sin atender a los límites administrativos que fijan los mapas.

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